El Passeig Marítim de Palma quedó inundado el sábado por la mañana. Foto: P.PRIETO.

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El Centro de Gestión de Emergencias 112, dependiente del Govern balear, multiplicó casi por dos las llamadas de alerta recibidas durante el pasado fin de semana debido, en gran parte, a los incidentes relacionados con el viento y la lluvia. Este mes de agosto el centro recibe cada día entre 2.000 y 2.300 llamadas de media. El fin de semana fueron 5.777 las personas que llamaron al 112 precisando la actuación de los servicios de emergencia. El sábado se recibieron 3.616 llamadas "528 de ellas entre las 11.00 y las 12.00 de la mañana, momento en que la descarga de agua fue más violenta, especialmente en la zona de la bahía de Palma", mientras que el domingo fueron atendidas 2.161 peticiones.

El director de general de Interior, Antoni Torres, acompañado por el director del 112, Vicente Soria, ofreció ayer una rueda de prensa en Palma para explicar los incidentes ocurridos durante el temporal, que ha mantenido en alerta Balears hasta ayer. Torres indicó que el sábado el 112 gestionó un total de 102 incidentes en Balears; 81 en Mallorca, 14 en Eivissa y Formentera y 7 en Menorca.

Torres dijo que a pesar de que para hoy se prevé que mejore el tiempo, «es necesario insistir en una serie de recomendaciones para que no haya sorpresas, porque aunque haga sol, en cualquier momento se gira el tiempo y se empieza a llover, y hay ciertas actividades que se deben evitar como hacer torrentes o salir de excursión». Igualmente, el director de Interior del Govern balear agradeció a los miembros de los servicios de emergencia el trabajo realizado estos días, y pidió «comprensión» a los ciudadanos que hayan tenido que esperar más de la cuenta «porque en estos casos hay que priorizar las situaciones en las que puede haber víctimas y las incidencias más pequeñas a veces tienen que esperar».

Del total de incidentes gestionados, 37 de ellos se trataban de inundaciones en viviendas, locales, sótanos, párkings o demás, 28 eran accidentes de circulación en los que no hubo daños personales, y 7 por derrumbes o peligro de desplome de edificios. A su vez hubo que coordinar 15 peticiones de auxilio, más de la mitad procedentes de embarcaciones en apuros. El lunes y ayer las llamadas referentes a incidentes con el mal tiempo no superaron la docena, a pesar de que llovió intensamente en la zona de Calvià y en la parte norte de Mallorca.