En concreto, sus efectos llegarán a la Isla el próximo viernes, 8 de marzo. El pronóstico del tiempo anuncia cielos nubosos o cubiertos con precipitaciones ocasionales acompañadas de barro, tendiendo durante la tarde a intervalos nubosos sin descartar algún chubasco aislado. Las temperaturas nocturnas experimentarán un ascenso notable, mientras que las diurnas sufrirán pocos cambios o un ligero descenso. El viento soplará moderado con algún intervalo de fuerte, del sureste girando a suroeste.
La posibilidad de precipitaciones se incrementará el sábado, cuando se esperan intervalos nubosos, predominando las nubes altas, aumentando por al mañana a cielos nubosos o cubiertos con precipitaciones generalizadas. Las temperaturas serán muy parecidas a las del viernes. El viento soplará de moderado a fuerte del sur y suroeste, girando a oeste por la noche.
Antes, días primaverales
Mientras llega la borrasca, Mallorca experimentará un par de jornadas primaverales. Este miércoles se esperan cielos poco nubosos o despejados. Las temperaturas diurnas subirán ligeramente. El viento será, en general, flojo de componente oeste tendiendo a dirección variable con brisas costeras débiles por la tarde. El pronóstico del tiempo para el jueves anuncia Intervalos de nubes altas aumentando por la noche a cielo nuboso. Las temperaturas serán muy parecidas a las de este 6 de marzo subirán un poco, sin descartar alguna helada débil preferentemente en la Serra de Tramuntana. El viento soplará flojo variable, aumentando hacia el mediodía a este moderado y por la noche con intervalos de fuerte en la vertiente norte de la Serra. De hecho, la Aemet ha activado alerta amarilla por fuertes rachas de viento, que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora en dicha zona entre las 18:00 horas del jueves y las 4:00 horas del viernes.
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