El nuevo tren a su llegada al Moll Vell del puerto de Palma, con la Seu al fondo. | CAIB

TW
9

El primero de los cinco nuevos trenes eléctricos que el anterior Govern del Pacte compró por 54,6 millones para reforzar el servicio que presta Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) ya ha llegado a los talleres de la empresa pública. El 90 % se ha pagado con fondos europeos. El traslado del vehículo desde el puerto de Palma ha requerido de un importante operativo para llevarlo hasta Son Rutlán, donde están las instalaciones ferroviarias. El resto está previsto que lleguen progresivamente entre marzo y junio, y la consellera de Mobilitat, Marta Vidal, ha señalado que es una «necesidad urgente mejorar el transporte público para dar cobertura a los usuarios».

Vidal ha asegurado que el Govern continuará con el incremento de frecuencias por la noche, los fines de semana y las vísperas de festivos. Sobre los nuevos trenes ha comentado que su puesta en marcha se hará de la manera «más rápida posible» y en función de «la velocidad de los medios de los que se dispondrá», puesto que los convoyes requieren de un proceso de prueba y de la formación de personal.

Noticias relacionadas

Se trata de unos trenes de última generación, compuestos por cuatro vagones cada uno y que disponen de muchos avances respecto a los que se usan actualmente en Mallorca. Su estructura es de aluminio, por lo que pesan menos y consumen menos energía; son cuatro metros más largos y ofrecen mayor capacidad respecto de los que actualmente se usan y, a demás, esto permite más espacio reservado para llevar bicicletas.

Una diferencia significativa es que tienen tres puertas de entrada por cada lado del vagón, la cual cosa facilita el acceso del pasaje y una mayor agilidad en la carga y descarga de viajeros. Electrónicamente, también están más avanzados y vienen dotados con mejores sistemas de seguridad eléctrica que aportan fiabilidad y agilidad ante posibles incidencias.

Asimismo, estos trenes tienen dispositivos informativos para el pasaje más actualizados y desde el control del servicio ferroviario podrán controlar en directo lo que ocurra en el interior de los vagones. Algunos de estos avances técnicos se prevén incorporar en la flota actual para mejorar la seguridad y la fiabilidad.