Seguidores del Betis este sábado en Son Moix. | Ultima Hora

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Han pasado ya tres días del partido entre el Mallorca y el Real Betis pero lo sucedido en el estadio de Son Moix con una facción de la hinchada verdiblanca todavía escuece en el seno del mallorquinismo. «Estoy indignado porque lo sucedido el sábado no tiene nombre. Hemos pedido una cita con el club, que todavía no ha contestado, porque hay que depurar responsabilidades. No puede volver a ocurrir. La imagen que se dio al mundo entero es tercermundista. Es una vergüenza». De esta forma tan contundente se expresó este lunes a este periódico Sebastià Oliver, presidente del Moviment Mallorquinista, que ha solicitado una reunión para conocer de primero mano todo lo que ha sucedido.

«Moviment Mallorquinista está para el socio y vamos a defenderlos a todos. Me siento en el deber de hacerlo y explicaremos todo lo que se hable. Estamos para defender al mallorquinismo y no para reír las gracias a nadie», apuntó Oliver.

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El presidente del Moviment Mallorquinista no se explica qué pudo ocurrir porque cuando los seguidores bermellones se desplazan fuera de casa, tienen que pasar una serie de filtros. «Nosotros pedimos entradas para ir a otros estadios y tenemos las que nos dan. Además, van con nombre y DNI porque lo ponemos nosotros. El listado de los que viajan lo tienen el club contrario y al servicio de seguridad. Si tú pones una grada de 160 personas para los aficionados visitantes, es la capacidad que tienes. Esas son las entradas que tienes que dar y con nombre y DNI», recalcó.

Cuando se le preguntó por las disculpas del club fue más allá. «No creo que sean solo 43 los abonados que han sido perjudicados; más bien 430... pero da igual, aunque hubiera sido uno. No hay derecho de quitar a alguien del asiento que paga. Si yo pago mi abono, por qué me tengo que desplazar a otro sitio. No hay derecho».

El presidente de la Unió de Penyes Mallorquinistes, Jaume Pujol, calificó como «surrealista» la situación vivida el pasado sábado en el estadio de Son Moix con el traslado de abonados bermellones a otra zona para dejar espacio a los seguidores del Real Betis. El dirigente de la Penya de Galilea, que aseguró haber recibido el malestar de socios molestos por tener que dejar su asiento habitual, consideró que los responsables de la SAD balear tendrían que haber «previsto de otra manera» la reubicación de los aficionados béticos si tenían conocimiento de la afluencia masiva de la hinchada visitante y remarcó que otros clubes como recientemente la Real Sociedad han tomado medidas para contener la marea verdiblanca que habitualmente acompaña al conjunto de Heliópolis en todos sus desplazamientos. El CEO de Negocio del Real Mallorca, Alfonso Díaz, también se expresó. «No tenemos tanta afición visitante, tenemos una grada dimensionada a las aficiones que viene, se identificó la venta de entradas, avisamos a la Policía e hicimos lo que recomendaron las fuerzas de seguridad pare reubicar a todos los seguidores del Betis juntos. Lo importante es que no hubo problemas de orden público».