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Efe|TORONTO
El tenista mallorquín Carlos Moyà se ha clasificado de manera brillante para los octavos de final del Masters Series de Toronto, tras eliminar sin apenas dificultades al estadounidense Alex Bogomolov, mientras que el también español David Ferrer no ha podido con su rival, el alemán Nicolas Kiefer, dentro de la segunda ronda del prestigioso torneo canadiense.

Peor suerte corrió el también español Ferrer, que en ningún momento demostró tener opciones de ganar el encuentro. Kiefer dominó desde el primer set, pero fue en el segundo cuando jugó con mayor contundencia, venciendo finalmente al español por 6-3 y 6-1.

Moyà ratificó que es uno de los favoritos a ganar el torneo y que se encuentra en un extraordinario estado de forma, en un partido muy sencillo, que resolvió en tan solo dos sets, por un claro y contundente 6-4 y 6-3, y en el que el estadounidense apenas puso oposición ante el cuarto cabeza de serie, que avanza firme en su propósito de llegar a los Juegos de Atenas plenamente adaptado a la superfície y consolidado entre los mejores del ránking.

La derrota en las semifinales de Umag no ha perjudicado a un Carlos Moyà cuya regularidad a lo largo de la presente temporada está siendo una de las constantes que le lleva a ser uno de los más peligrosos rivales que cualquier jugador puede encontrarse a día de hoy sobre la pista.

En la jornada de ayer, el número uno del mundo y reciente ganador de Wimbledon, Roger Federer, también sigue con vida dentro del Masters Series de Toronto.

El suizo pasó relativos apuros en el primer set ante el sueco Robin Soderling, al que derrotó en dos mangas por 7-5 y 6-1. Toda vez que Federer se hizo con la primera manga, el resto del encuentro resultó ser un mero trámite para el tenista helvético, uno de los grandes rivales de Carlos Moyà a la hora de hacerse con el título, en el que es el último gran test para muchos de los jugadores en los albores de los Juegos de Atenas, el objetivo que muchos de los jugadores se han marcado en este tramo de la temporada. Allí se verán las caras muchos de estos jugadores y se vivirán partidos de alta intensidad con las medallas en juego, un trofeo que todos codician.