La lista de productos de temporada es larga, desde rábanos a coles, acelgas, alcachofas o puerros. | Pep Córcoles

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Es época de buena verdura, de la que en Mallorca llamamos verdura de sopes, en alusión al típico plato local de las sopes mallorquines. Los agricultores especializados en la huerta se aprestan ahora a la recolección y venta de lo que han cuidado con esmero durante los últimos tres meses. Miquel Mas, de can Manenta, de Manacor, es uno de ellos. El payés manifiesta que «no ha sido fácil debido a los calores inusuales que hemos padecido hasta hace pocas semanas y a la falta de lluvia, pero al final ha llegado a buen puerto».

El listado de verduras que están de temporada y al alcance de los consumidores en los mercados es extensa. Así pues se encuentran con facilidad: rábano, zanahoria morada, nabo, rabanito, sofrito, puerro, col, coliflor, acelga, espinaca, alcachofa, apio, perejil, cilantro, repollo.

Miquel Mas califica la cosecha como «positiva». El payés agrega que «la verdura crece este año de forma rápida y sana». Considera que ello es «consecuencia de la bajada de temperatura suave que ha habido las últimas semanas y a que se han producido lluvias de forma intermitente. Éstas han ayudado a recargar los pozos. Eso también nos ha ahorrado algunos riegos. Es importante tener en cuenta que regar, hoy en día, significa incrementar gastos pues el combustible o la electricidad cuestan mucho», explica Mas.

El agricultor incide en que «en general el coste de producción es alto pero es preciso puntualizar que la venta se mantienen más o menos estable, dentro de la gravedad, por decirlo de alguna forma, de una situación casi de crisis económica permanente». Es cierto que las ventas en el llamado Situat de Productors son «bastantes buenas».

Los payeses apuntan que las ventas se mantienen estables.

El Situat de Productors es un espacio que Mercapalma destina exclusivamente a los payeses y que funciona como una especie de lonja de verduras. Abre tres días a la semana y en el punto principal donde adquieren frutas, verduras y hortalizas de las llamadas Kilómetro 0 los supermercados, mayoristas y fruteros.

Pero aunque Mas sostiene que las ventas son buenas y los precios razonables, otras voces como las de Miquel Reus, payés de Muro, señalan que «no se debe a una mayor aceptación o aumento del consumo sino más bien a una reducción de vendedores». Este otro productor señala que «durante el último año se han producido varias jubilaciones de productores que acudían cada semana al mercado central. Esta bajas no han sido sustituidas porque no hay payeses».

«Esto provoca que los que quedamos vendamos más, pero eso es pan para hoy y hambre para mañana». Mas asiente a la puntualización de su colega y reconoce: «tengo el mejor ejemplo en mi casa. Yo sustituí a mi padre al frente del huerto y llevo 44 años de trabajo, pero no voy a tener relevo generacional. Mi hijo ha preferido estudiar magisterio». Cuando se jubile Miquel Mas las diez ‘quarterades’ de huerta que cultiva en el paraje del Pla de Son Perot dejarán de producir. El payés dice con resignación que «es comprensible que la juventud no quiera seguir con el campo. Es un trabajo expuesto a las inclemencias del tiempo, duro, y lo que es peor, no tienes días libres ni vacaciones».