Los hechos ocurrieron en julio de 2018 en la carretera de Llubí. | M. NADAL

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Un juzgado de lo Penal de Palma ha absuelto al conductor que circulando drogado atropelló mortalmente a un peatón sobre la acera en sa Pobla en julio de 2018. La magistrada considera que el comportamiento del acusado, que fue asistido por el abogado Eduardo Valdivia Font, no constituyó «una imprudencia grave», que es de lo que le acusaba la Fiscalía. Antes de la vista, celebrada semanas atrás en una sala de Vía Alemania, la compañía de seguros indemnizó debidamente a los familiares del fallecido, nacido en Marruecos.

Durante el juicio, el procesado, español de 52 años, explicó a la jueza que cuando llegaba al pueblo después trabajar vio a un hombre caminar por la acera, luego se pasó a la calzada y para evitarlo se subió con el vehículo al pavimento, donde frenó bruscamente, pero el peatón volvió a cambiar su trayectoria y acabó en la acera de nuevo. Ahí no pudo, según él, hacer nada para esquivarlo. El mismo acusado confesó que el día anterior consumió cocaína, pero que no estaba en ese momento «influenciado» por las drogas. Este extremo fue recogido en el atestado de la Benemérita. También negó que estuviese con el móvil en la mano.

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Uno de los agentes de la Guardia Civil que acudieron como testigos explicaron que el accidente mortal se debió a la somnolencia, ya que no circulaba muy rápido y tuvo que ser por una distracción «al no haber frenadas anteriores ni nada dañado previo a la trayectoria», depuso el funcionario ante la magistrada.

La jueza sostiene en el fallo, al que ha tenido acceso Ultima Hora, que solo cabía la condena penal del procesado de apreciarse imprudencia grave, pero «ni la distracción o la maniobra para evitar el atropello permiten llegar a configurar la acción u omisión del acusado como imprudente y calificarla de grave», apunta. Asimismo también descarta que el positivo en cocaína, y tras escuchar el testimonio de los guardias civiles en el juicio, «fuese determinante en la producción del hecho».

El trágico accidente tuvo lugar sobre las 17.15 horas del día 14 de julio de 2018 en la vía Ma-3501. El procesado conducía una Ford Transit cuando de repente perdió el control de la furgoneta e invadió la acera derecha. Por allí caminaba un vecino de la localidad, al cual golpeó con el retrovisor y con el marco del parabrisas, lo que envió al suelo a la víctima. Después lo arrolló y lo arrastró casi 13 metros. Como consecuencia del suceso, el hombre sufrió un traumatismo craneoencefálico grave, que le produjo un shock hemorrágico multiorgánico postraumático que acabó en muerte poco antes de las 18.00 horas de ese mismo día.