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J.JIMÉNEZ/ASSUMPTA BASSA
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional y la Comisaría de Manacor investigaban al cierre de esta edición la muerte de un matrimonio de esa localidad, que apareció carbonizado junto a un coche en llamas en el Camí des Murterar. Según informaron en fuentes policiales, las víctimas mortales son Mateu Llodrà, de 62 años de edad, y su esposa Joana Llull, de unos 60. La pareja, que residía en la calle Sant Roc de Manacor, había estado cenando con sus hijos y poco antes de las once de la noche se marcharon en un coche en dirección al Camí des Murterar.

El hallazgo lo llevó a cabo un conductor que divisó, cerca de la carretera, un coche que se encontraba en llamas. Hasta aquel lugar acudieron ambulancias del 061, Bombers de Manacor y la Policía Local de Manacor, que confirmó que en el interior del vehículo había una persona totalmente calcinada. En esos primeros momentos se especuló con la posibilidad de un accidente de tráfico, pero instantes después se descubrió, a tres metros del turismo, otro cuerpo carbonizado. El del interior se correspondía con una mujer, que resultó ser Joana Llull, y el otro cadáver era el de Mateu Llodrà. Inmediatamente la Policía Local pasó el caso al Cuerpo Nacional de Policía. Desde la Comisaría de Manacor se montó un dispositivo especial y los agentes alertaron a los Bombers para que no sofocaran las llamas ya que podían destruir pruebas importantes. La zona quedó precintada y, al cierre de esta edición, los investigadores contemplaban varias posibilidades, entre ellas la de un doble crimen o un accidente.

En ese sentido, la hipótesis que cobraba fuerza anoche era que el coche se incendió porque el conductor podía transportar algún tipo de sustancia altamente combustible. El Ford Fiesta calcinado presentaba la puerta del conductor abierta, lo que da a entender que Mateu Llodrà salió envuelto en llamas y cayó tres metros después ya muerto. Su mujer, en cambio, parece ser que tenía serios problemas de movilidad y ese podria ser el motivo por el cual no consiguió salir del coche en llamas. En cualquier caso, al cierre de esta edición, la policía y el juez de Manacor mantenían todas las hipótesis abiertas y esperaban a que amaneciera para poder llevar a cabo una inspección ocular en profundidad. El terreno donde apareció el Ford Fiesta en llamas es propiedad del matrimonio fallecido y, de hecho, la vivienda de fora vila se encuentra muy cerca de allí. Parece ser que Mateu Llodrà transportaba a menudo gasolina en el coche. La familia de las dos víctimas mortales fue informada del dramático hallazgo y se personó rápidamente en la finca del Camino Viejo de Sant Llorenç, donde se vivieron escenas de gran emotividad. El juez de guardia de Manacor se desplazó hasta aquel terreno y coordinó in situ todo el operativo policial.