La Guardia Civil de León ha logrado recuperar los 10 pergaminos de los siglos XIII y XIV que fueron robados a principios de año del archivo municipal de Sóller. Algunos de los documentos, entre los que se encontraba una copia del testamento del rey Jaume I, se ofrecían a través de Internet por precios que alcanzaban los 5.000 euros.
Las pesquisas para recuperar los pergaminos se iniciaron cuando un historiador solleric descubrió en una página de Internet varios pergaminos a la venta. Tan solo unos meses antes, él mismo había consultado estos mismos papeles en el archivo municipal.
Al tener conocimiento de estos hechos, el alcalde de Sóller, Carles Simarro, se puso en contacto con la Benemérita.
La Guardia Civil confirmó que los documentos no se encontraban en el archivo y desde ese momento se aceleraron las diligencias para recuperarlos.
La investigación culminó el pasado 23 de noviembre, cuando se detuvo al presunto ladrón. Se trata de M.E.C., un funcionario del ayuntamiento de Sóller de 55 años de edad que ya había tenido varios problemas y que incluso llegó a ser suspendido de empleo y sueldo en una ocasión.
El funcionario negó en todo momento que tuviera relación con el robo de los documentos y explicó que los había adquirido en Madrid, pero de manera completamente legal. El hombre quedó en libertad con cargos.
Paralelamente, la Guardia Civil descubrió que uno de los pergaminos se puso a la venta en la red por 1.800 euros y que se había formalizado el contrato de compraventa. Esta prueba aceleró las tareas de la Benemérita, que trasladó a varios de sus agentes hasta el punto de venta, una librería de viejo de León.
Los agentes mantuvieron una entrevista con el responsable del negocio, que ofreció su inmediata colaboración y entregó los pergaminos que tenía en su poder a los agentes. También ayudó a localizar los otros dos pergaminos que ya se habían vendido, y explicó los detalles de cómo se había producido la compraventa. El librero aseguró que el funcionario le había ofrecido los pergaminos tras asegurarle por escrito que eran de su propiedad.
El robo en el archivo puso de manifiesto que las medidas de seguridad no eran todo lo estrictas que se cabía esperar. El consistorio solleric se comprometió a hacer un esfuerzo para garantizar que no volverán a desaparecer documentos históricos de alto valor.
Una de esas medidas será la de microfilmar cada pergamino para que el contacto con el investigador no sea directo, sino mediante ficha.
El archivo solleric fue catalogado por última vez en el año 1985.
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