Las pequeñas Lila, Camil, Marta, Lola, Nora, Inés y Lara en el huerto ecológico, entre los girasoles. | Julián Aguirre

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Tras la visita sorpresa realizada por la reina Letizia y sus dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, el 4 de agosto, la Granja Escola Jovent saltó a la primera línea informativa, pero lleva ya 25 años ofreciendo una gran labor social y educativa, tanto en invierno como en verano, y cientos de niños y niñas han pasado por sus instalaciones y guardan recuerdos muy especiales de esa inolvidable experiencia.

«Éramos un grupo del Club Esplai Jovent y Tomeu Suau, párroco de sa Indiotería, tuvo la iniciativa de alquilar y montar una granja escuela en esta finca, sa possessió de Son Moll», comenta Xisca Momblanch, una de las cinco fundadoras y coordinadoras de La Granja Escola Jovent.

Se cumplen 25 años de la Granja Escola Jovent.

Tras un año de reforma, con la ayuda de vecinos del barrio, y con diez socios, en abril de 1997 se constituyó la cooperativa y en marzo de 1998 se abrían las puertas con visitas escolares y proyectando campamentos de verano. Un camino, hasta estos 25 años, nada fáciles pues a los tres años, de los 10 socios iniciales se quedaron cinco, que son los actuales. «Hemos pasado varios baches económicos y los vamos salvando gracias a las cuotas, pero tenemos un déficit importante. Los dos meses de verano es el único ingreso que nos cubre gastos, pero a lo largo del año son muchos los arreglos de mantenimiento que tenemos que realizar», comentan.

La visita de la reina Leticia y sus hijas ha servido para que la Granja Escola Jovent fuera portada en numerosos medios de comunicación. La presidenta del Govern, Marga Prohens, y el alcalde de Palma, Jaime Martínez, realizaron días después una visita oficial y se interesaron por su situación.

Se cumplen 25 años de la Granja Escola Jovent.

Mientras tanto, los monitores continúan con su labor. Un total de 130 niños y niñas llegan a las ocho de la mañana y viven una experiencia de diversión y aprendizaje lúdico, hasta las 17 de la tarde, en la que son recogidos por sus padres o abuelos. Actividades y talleres en los que los chicos y chicas conviven en un entorno natural y están en contacto con animales de la granja. El lema de este verano es Estima el teu món. Distribuidos en varios grupos, las tareas, visitas, actividades y momentos de ocio se reparten. Las sombras de los árboles animan a que algunos de los grupos opten por realizar los talleres al aire libre, mientras otros comienzan a preparar la masa para hacer pan en las mesas del comedor. En los corrales se visitan los diferentes animales, desde conejos, cabras, ovejas, ocas, etc para ver si les falta agua o comida, o en el caso de los caballos Trot y Torrent, cepillarlos antes de empezar a montar en un breve paseo por la granja. En el rebaño de 14 cabras autóctonas, y ocho ovejas, está Dolly, una oveja negra, precisamente la más simpática y menos asustadiza que deja que los niños y niñas se acerquen a ella para darle algo de alfalfa. Mientras, a pocos metros, se encuentra descansando la vaca Estrella, impasible ante la presencia    de los pequeños que quedan asombrados ante su gran tamaño.

El huerto es otro de los destinos de estos niños, que a diario cuidan los cultivos. Lechugas, tomates, calabazas y girasoles, entre otros productos, que sirven para hacer una cocina de aprovechamiento y que los usuarios conozcan estas verduras y frutas de kilómetro cero. El momento más refrescante de la jornada tiene lugar en la piscina, con un divertido chapuzón. Los cinco fundadores Xisca Momblanch, Miguel Ángel Cegro, Antoni Garau, Laura Póveda y Pilar Ramírez continúan con su labor social y educativa de manera apasionada, y con la misma ilusión de hace 25 años.