Imagen del túnel que será sellado. | M. À. Cañellas

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La calle Nuredduna de Palma se convertirá en peatonal al 100 % a partir de finales de 2021, según ha explicado este jueves la regidora de Infraestructuras y Accesibilidad, Angélica Pastor.

El presupuesto de esta obra es de 3 millones de euros, que se financiará a través de un préstamo bancario, y se actuará sobre una superficie de 5.540 metros cuadrados entre las Avenidas y la plaza de las columnas, de los que el 25 %, unos 1.000 metros cuadrados, será superficie ajardinada.

Pastor informó que en siete ocho meses esperan que pueda estar licitado el proyecto y luego hay un plazo de ejecución mínimo de 12 meses, «por lo que nuestros planes es que todo esté acabado para finales de 2021».

El proyecto en el que se está trabajando contempla el sellado del túnel en su acceso a esta calle así como la supresión de las cerca de 70 plazas de aparcamiento que hay actualmente.

Para dar una alternativa a los residentes el Consistorio cuenta con que en verano del próximo año se recuperará la gestión del aparcamiento de las Avenidas, con lo cual se les podrán ofrecer algunas plazas del mismo, así como con la construcción de un nuevo estacionamiento en la calle Médico José Darder.

Al quedar totalmente prohibido el tráfico rodado por la vía se deberá desviar el paso de las líneas de autobús que ahora mismo recorren la calle, algo que está en estudio en el departamento de Movilidad, y tan solo se permitirá el paso a través de vías adyacentes a los usuarios de los dos garages que hay en la vía, así como a las ambulancias de Clínic Balear.

La edil detalló que el nuevo corredor verde peatonal contará con una plataforma única de suelo drenante, que evita la escorrentía superficial y favorece que las plantaciones progresen mejor. La calle cuenta con 275 metros de largo y 20 de ancho y la propuesta que se baraja ahora mismo contempla una franja de 6 metros a un lado, otra de 10 metros al otros lado y un parterre central de 4 metros.

Se mantendrán los 35 alcorques que hay en la actualidad a ambos lados de la calle, «pues los plátanos se encuentran en buen estado y tienen ya un tamaño importante», dijo. Además en la zona central del paseo habrá un parterre en el que se plantarán 23 árboles más de especies mediterráneas como el granado, el olivo, el algarrobo el palmito; así como plantas arbustivas y aromáticas como junípero, madroño, frankenia o viburnum, según especificó el jefe del Departamento de Infraestructuras y Accesibilidad, Urbano Sánchez-Pastor.

Éste indicó que el planteamiento de los arquitectos es que «no solo se trata de generar una zona de paso que sea peatonal y más amable, sino que también invita a quedarse».

El Ajuntament de Palma se reunirá con los vecinos y el próximo viernes 28 de febrero lo hará con las patronales comerciales para exponerles el proyecto, pero la responsable municipal consideró que «es un aliciente para todos pues estamos hablando de barrios muy grises y condensados de población y de edificios y lo que se pretende es dar un poco de respiro a la zona. Queremos más zonas verdes, más amables más árboles y apostamos por los objetivos del desarrollo sostenible y sobre todo por la lucha contra el cambio climático».

Pastor admitió, por último, que este proyecto es el único que está previsto hacer esta legislatura en relación al eje cívico, por lo que si éste continuará hasta la plaza de Pere Garau es algo que ya «dependerá del próximo gobierno municipal».