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La Comisión Europea (CE) propuso ayer crear un sistema de vigilancia para la frontera marítima del sur de la UE, en la que España tiene un notable protagonismo por su proximidad con el norte de Àfrica, dentro de una nueva serie de ideas para reducir el nivel «sin precedentes« de la presión de la inmigración ilegal.

Además, la CE planteó varias medidas para promover la inmigración legal a Europa, como la creación de centros de empleo en los países de procedencia y la puesta en marcha de programas de inmigración temporal.

«Tenemos que cooperar con los países vecinos, especialmente los africanos, para desarrollar una estrategia común de inmigración», afirmó el comisario europeo de Justicia, Seguridad y Libertades,para quien esto evitaría que la inmigración «sea un negocio para las mafias y la explotación de los inmigrantes irregulares en Europa».

El Ejecutivo de la UE propone crear un Sistema Europeo de Vigilancia (Eurosur), que reemplazaría de forma gradual los sistemas nacionales a través de una combinación de radares y satélites.

El documento apoya la decisión de la Agencia Europea de control de fronteras (Frontex) realice patrullas de control continuas entre la primavera y el otoño de 2007 como «elemento de disuasión» ante la próxima temporada de llegada por mar de inmigrantes irregulares procedentes de Àfrica.