Damià Nicolau (centro) uno de los impulsores de la nueva UM, en un acto con Bartomeu Calafell y Maria Antònia Munar.

TW
19

Unió Mallorquina se refunda. Casi 13 años después de la desaparición del partido que fundó Jeroni Albertí en 1982, exdirigentes de la formación han decidido volver a crearlo y han convocado un Consell Nacional el día 20 de febrero con la intención de dar marcha atrás a la desaparición del partido acordada el 28 de febrero de 2011. Varios exdirigentes de UM, entre los que se encuentra Damià Nicolau, que fue secretario general con Maria Antònia Munar, han decidido revivir un partido que fue clave en la gobernabilidad de Baleares entre 1983 y 2011, cuando desapareció.

La convocatoria la firma Joan Monjo, que fue secretario general de la formación cuando se disolvió. Se ha hecho llegar a los exmilitantes de antigua Unió Mallorquina, algunos de ellos integrados ahora en el PI, como es el caso del presidente del partido, Tolo Gili. En ella se incluye como primer punto del orden del día dejar sin efecto el acuerdo de desaparición que tomó el Consell Nacional y nombrar una gestora que prepare el próximo congreso de refundación.

Noticias relacionadas

Damià Nicolau asegura que es imprescindible que exista un partido de centro nacionalista en Mallorca que sea capaz de reunificar a todas las formaciones que hay en las islas bajo las siglas de UM, como sucedió en el año 1999 con la presidencia de Maria Antònia Munar. Nicolau cree que los graves casos de corrupción que salpicaron al partido en su momentos ya están pasados «con creces». «No nos amnistiaron ni indultaron y todo eso ya pasó», señala.

Afirma que en los últimos años ha percibido decepción de ciudadanos que demandaban un partido que recogiera las aspiraciones de centro nacionalista, como UM, y ha anunciado que comenzarán a trabajar para crear estructura en los municipios con la aspiración de presentarse a las próximas elecciones autonómicas. «Lo que se decidirá es dar marcha atrás al acuerdo del Consell Nacional de disolver UM y recuperar las siglas», señala Nicolau.

UM desapareció en 2011 tras graves escándalos de corrupción que afectaron a la cúpula de la formación en Mallorca y que acabaron con tres de sus principales dirigentes en la cárcel, incluida Maria Antònia Munar. Tras la disolución, cargos del partido, entre ellos Josep Melià, crearon Convergència per les Illes, que terminó fusionándose con la Lliga Regionalista de Jaume Font y se convirtió en Proposta per les Illes (PI), en la que aún siguen Melià y otros cargos.