Productos tecnológicos, herramientas e incluso bolsos de marca buscan una segunda vida. | Jaume Morey

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La crisis derivada de la pandemia ha provocado que las tiendas de segunda mano se encuentren en plena efervescencia. El objetivo es adquirir productos a un precio más económico. Pero predomina el interés por vender aquello de cierto valor para conseguir dinero al contado y al momento. Esa es la gran diferencia respecto las páginas webs donde el propietario oferta sus propiedades y está a la espera de que alguien lo compre. Y puede que la compra no se formalice nunca.

A las puertas del Cash Converters se forma una cola en la sección de compras. Casi cualquier cosa es susceptible de ser vendido y cuando la necesidad aprieta, puede ser un buen recurso para obtener fondos inmediatos. Dolores Lebrato, responsable de ventas de Cash Converters en la Avinguda Joan March, confirma el incremento de clientes. «Sobre todo a final de mes o al principio», explica. El aumento del paro sería uno de los motivos por el que se acercan más vendedores, pero también están los que quieren deshacerse de aquello que no utilizan y que podría tener una segunda oportunidad.

En este establecimiento se han adaptado a la pandemia y han reducido su aforo, además de potenciar la valoración de productos de forma on line que luego recogen a domicilio. «También ofrecemos préstamos al instante, desde 50 euros hasta 500 y tienen 30 días para devolverlo», explica Lebrato.

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En sus estanterías de venta al público se mezclan desde la Thermomix a consolas de varias generaciones, joyas, bolso de marca, teléfonos móviles o carritos de bebé. También hay bicicletas «pero las pesas y demás aparatos de gimnasio desaparecieron por la demanda tras el confinamiento». El repunte de ventas se explica por un tipo de cliente que busca un producto más económico respecto a uno a estrenar. «Preveemos que este invierno un repunte de personas que vengan a vender para conseguir fondos», dice Lobato. Los clientes, por otro lado, se muestran muy reticentes a hablar y no quieren hacer declaraciones.

Repunte

En el mismo sentido se expresa Carlos Chacón, encargado de la tienda Cex. «Cuando lo vendes por Internet dependes de otra persona. Desde julio hemos notado que viene más gente a vender sus consolas, ordenadores o teléfonos y esperamos que en Navidad haya un pico. Tanto para vendernos sus productos tecnológicos como para comprar de cara a las fiestas», explica Chacón.

Portátiles, teléfonos de última generación, videojuegos, tablets o cámaras fotográficas son el nicho en el que trabaja este establecimientos próximo a Plaça Espanya. La crisis también explica el repunte de personas que se acercan hasta la tienda para conseguir dinero al contado. Tras el confinamiento, la tienda ha ido recuperando la actividad pero reconocen que la mayor parte de operaciones es la de compra de tecnología. La necesidad aprieta y estas tiendas son un balón de oxígeno financiero.