El ex presidente del Govern, Jaume Matas, está pasando las fiestas navideñas en la Isla, como ayer confirmaba a este diario: «He venido a pasar las fiestas y regreso de nuevo a Estados Unidos a principios de 2009», explicaba Matas desde su casa de la calle Sant Feliu de Palma.
No quiso hablar de ningún tema, pero a nivel particular sí que se interesó de la evolución del mundo empresarial balear, sin entrar en más detalles. «Me acabo de levantar, porque ayer noche nos acostamos muy tarde celebrando la Nochebuena, quiero pasar unos días en familia y en breves días abandonaré la Isla», comentó, un tanto sorprendido por la llamada, la primera que recibía de la mañana, pero, aun así, estuvo atento y respondió a las preguntas que se le hicieron con mucha diplomacia y con buen talante.
Recién llegado de Estados Unidos, donde ha cambiado su domicilio particular de Washington a New York, se mostró muy amable, tranquilo y con ganas de hablar, pero sin hacer ningún tipo de declaración, pese a la lógica insistencia que él desbarató de la mejor forma posible.
Pasó en familia la Nochebuena y acudió a los matines de Santa Creu. Ayer al mediodía, abandonaba su casa de Palma en un coche para celebrar, también en familia, la tradicional comida de Navidad.
Matas ha regresado a Palma en unos momentos en los que la Fiscalia Anticorrupción está investigando cómo se amuebló su casa de la calle Sant Feliu, y cómo se justificaron estos gastos. Así, propietarios de comercios de la Isla donde compraron Matas y su esposa, María Teresa Areal, han prestado declaración durante las últimas semanas ante la Guardía Civil por este concepto. Matas, pese a todo, ha optado por pasar las Navidades en familia, en Mallorca, de ahí el semblante tranquilo que mostraba ayer.
El ex president tiene previsto abandonar Mallorca, a principios del próximo año, según confesó él mismo.
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