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La base aérea de Son Sant Joan, que albergó ayer los actos conmemorativos de la patrona del Ejército del Aire, Nuestra Señora de Loreto, da apoyo desde hace unos meses a la «operación Noble Centinela» cuyo objetivo es controlar la entrada de inmigrantes ilegales en el territorio español. Son Sant Joan está encuadrada en el Mando Aéreo General y tiene por misión dar apoyo a las unidades de despliegue de la OTAN. Por su orografía se le denomina «un portaviones en el Mediterráneo». En 2006 la base ha atendido más de 2.200 movimientos aéreos de aviones y unidades de fuerzas aéreas nacionales y extranjeras que han aterrizado o despegado en Mallorca.

El Escuadrón 801 de las Fuerzas Aéreas ha completado más de 2.300 horas de vuelo, principalmente en la ejecución de 15 operaciones reales de búsqueda y rescate así como en la participación de diversos ejercicios de carácter nacional, como el DAPEX de defensa aérea, y de coordinación de los diferentes centros de rescate nacionales o internacionales dentro del acuerdo SARMEDOC con Francia e Italia.

A su vez, Son Sant Joan ha contribuido con diversas tripulaciones en apoyo a las instalaciones en Afganistán y, desde hace unos meses, novedad en este 2006, participa en la «operación Noble Centinela», como parte de la colaboración del Ejército del Aire al control de la inmigración ilegal.

Estos datos los dio a conocer el coronel jefe del Séctor Aéreo de Palma y jefe de la base aérea de Son Sant Joan, Manuel Fernández-Roca Teigell, que ayer presidió los actos de la patrona del Ejército del Aire, la Virgen de Loreto.

A la ceremonia asistieron, entre otros, el jefe del Sector Naval, Francisco Javier Jáuregui García, y el general 2º jefe de la Comandancia General de Balears, Federico Lázaro Vicente, entre otros mandos militares. Asimismo, y en representación de la sociedad civil, asistieron el presidente del Parlament balear, Pere Rotger; el delegado del Gobierno, Ramon Socías, y la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer.