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El prestigioso médico"psiquiatra Luis Rojas Marcos pronunciará el próximo día 1 de julio, a las 20.00 horas, la conferencia «Ingredientes y ladrones de nuestra felicidad» en la Real Academia de Medicina, en la calle Can Campaner de Palma, invitado por el Club Ultima Hora.

Luis Rojas Marcos, que será presentado por Alfonso Ballesteros, presidente de la Real Academia de Medicina de Balears, es catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Nueva York (1985) y miembro de la Academia de Medicina de Nueva York (1982). En España, asesora instituciones preocupadas por temas sociales y de salud pública. Patrono de la Fundació «la Caixa», Rojas Marcos es autor, entre otros libros, de «La Ciudad y sus desafíos», «La pareja rota», «Las semillas de la violencia», que fue Premio Ensayo 1995, «Nuestra felicidad» "que se convirtió en uno de los más vendidos en 2001 en América y Europa" y «Más allá del 11-S», todos editados por Espasa Calpe.

En 1992, Rojas Marcos fue nombrado «Commissioner» o máximo responsable de los servicios municipales neoyorquinos de salud mental, alcoholismo y drogas. De 1995 hasta febrero de 2002 ha dirigido el sistema de sanidad y hospitales públicos de Nueva York. Su área de competencia incluía los dieciséis hospitales municipales y de la red de ambulatorios de la ciudad. El sistema cuenta con una plantilla de 43.000 empleados y un presupuesto anual de cuatro mil millones de dólares.

Luis Rojas Marcos nació en Sevilla en 1943. En 1968 emigró a Nueva York, donde se especializó en psiquiatría y reside desde entonces. Es doctor en Ciencias Médicas por la Universidad del Estado de Nueva York (1977). Tras los atentados terroristas en Estados Unidos del pasado 11-S, Rojas Marcos, junto con otros residentes españoles en Nueva York, se reunió con el presidente del Gobierno, José María Aznar, para narrar su experiencia.

En varias de sus intervenciones públicas realizadas en España, el invitado del Club Ultima Hora ha afirmado que la mayoría de los jóvenes violentos «ha sido víctima de malos tratos en sus primeros diez años de vida».

«La sociedad debe atajar la violencia familiar, pues esta es uno de los factores determinantes para que un adolescente desarrolle una conducta violenta», dijo.