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Unió Mallorquina y el PSM admitieron ayer claramente que su objetivo es «gobernar juntos», aunque sólo Pere Sampol se manifestó a favor de que el PSOE se incorpore a un futuro pacto que permita cambiar «el modelo de país» en Balears. UM y PSM dieron un golpe de efecto y un giro al futuro equilibrio de fuerzas para gobernar Balears. Cualquier acuerdo, según Munar y Sampol, pasa por las dos fuerzas nacionalistas, y por cumplir una serie de requisitos que mejoren la autonomía y la financiación de Balears. Las dos fuerzas nacionalistas tienen tan claro su objetivo que la reunión entre UM y PSOE, prevista para hoy, se ha suspendido hasta nuevo aviso. UM y PSM tienen intención de reunirse mañana para ultimar el documento que deberá aceptar el candidato que quiera presidir Balears. Munar dejó claro que en el encuentro con el PSM «no se ha hablado de cargos», pero sí de «modelo de país». «Coincidimos en la defensa de estas Islas frente a un Estado centralista», subrayó Sampol.

Cuando se le preguntó a Munar qué partido "PP o PSOE" podría sumarse a las reivindicaciones nacionalistas, la presidenta de UM fue clara: «El partido que se comprometa a aceptar nuestras propuestas, aunque nosotros tenemos nuestras preferencias». Sampol, en cambio, se pronunció claramente a favor de un pacto con los socialistas porque, según dijo, «plantearse un acuerdo con el PP es como creer en la reencarnación». El candidato del PSM dio prioridad al documento que se está elaborando con UM y aseguró que el programa que se comprometió a elaborar con el resto de partidos de izquierdas tuvo como objeto «tener un gesto que sirvió para hacernos una foto porque con 20 minutos de reunión no había tiempo para tratar ningún asunto».