Las viviendas vacacionales han tenido un crecimiento espectacular en las principales zonas turísticas de la Isla.

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RUIZ COLLADO/A. VICENÇ La fuerte demanda turística para este verano en Mallorca ha disparado este año el alquiler de chalets y viviendas vacacionales en los principales enclaves turísticos, caso de Pollença, Port de Pollença, Cala d'Or o la zona de Alcúdia, según fuentes inmobiliarias.

Las cifras que se están barajando en estos momentos rondan los tres millones por toda la temporada de verano o un millón por quince días: «La zona de Pollença es la que está registrando mayor actividad en este sentido, dado que es la que aglutina el mayor número de viviendas vacacionales y chalets. La demanda ha aumentado este año y esto está siendo aprovechado por los propietarios de este tipo de oferta de alojamiento. El volumen de negocio que se puede mover por el alquiler de esta oferta supera los 3.000 millones de pesetas».

La presión urbanizadora en el litoral mallorquín ha disparado el aumento de chalets y viviendas, «lo cual ha generado un alza de esta oferta que en un momentos de crecimiento turístico, al margen del tradicional que se aloja en hoteles y apartamentos, tiene una gran aceptación entre un segmento familiar medio alto, tanto nacional como el procedente de los principales mercados emisores extranjeros».

La Conselleria de Turisme anuncia que ante el crecimiento latente de las viviendas vacacionales y el plazo dado a los titulares de viviendas vacacionales para que soliciten su aprobación por los servicios técnicos de Turisme, «vamos a incentivar a partir del próximo mes de mayor las inspecciones en las principales zonas turísticas para controlar la comercialización de este tipo de oferta».

Pugna en la oferta de turismo rural
El director general de Ordenación de la Conselleria de Turisme, Josep Aloy, afirma que la actual oferta de agroturismo, turismo rural o turismo de interior que se comercializa, «cumple la normativa turística vigente, de ahí que cualquier tipo de oferta de estas características que se quiera comercializar mediante folletos o cualquier otro medio, deberá cumplir con todos los requisitos que se exige a este oferta».
El proyecto de creación de una red de alquiler de casas rurales, auspiciado pro la Asociación Defensa de Mallorca, con el objetivo de explotar en régimen de alquiler unas doce casas rurales ha sido criticado de inmediato por la Asociación de Agroturismo de Balears