El Grupo Parlamentario Socialista ha reprochado a la consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, que el Gobierno de la Comunidad de Madrid no haya «aprendido nada» para mejorar la situación en las residencias de la región, mientras que Más Madrid ha llegado a pedir su dimisión por estar «a la altura del cargo», mientras que la aludida ha afeado la táctica de «difamar por encima de todo».
Durante una interpelación en el Pleno de la Asamblea de este jueves, la diputada socialista Lorena Morales ha asegurado que la Comunidad «sigue en los peores rankings» en cuanto a la calidad de sus residencias y se sitúa como la región «con menos plazas públicas de España».
«Sólo tiene 25 residencias públicas de más de 500 que hay en Madrid y encima los presupuestos 2024 las recorta», ha defendido Morales, quien ha acusado a la Administración regional de reservar «todas las plazas nuevas» para «los conciertos». «Así que cada vez están ustedes más en manos de los fondos buitre, que son los que tienen detrás las empresas que gestionan las residencias», ha asegurado la diputada socialista.
Lorena Morales se ha referido a los casos de comida en mal estado detectada en algunas residencias y que han conllevado penalidades económicas para las empresas concesionarias, al tiempo que ha tildado de «chapuza» el nuevo contrato para el suministro de alimentos a estos centros, que incrementará un 25% el presupuesto y que se encuentra en proceso de adjudicación.
Por otro lado, la diputada del PSOE ha reclamado a Ana Dávila un plan de mejora de las instalaciones, pues según ha clamado, «las residencias se le están cayendo a pedazos», citando para ello el caso de la Santiago Rusiñol de Aranjuez, donde «hace unos días se cayó el techo del comedor». «Un techo con amianto, por cierto», ha asegurado.
Sobre este centro, se ha referido a la reciente agresión de un usuario a otro con un martillo, dejándolo en estado grave, una situación que ha relacionado con la «falta de personal» y sobre lo que ha acusado al Gobierno regional de mirar «para otro lado».
Morales se ha referido a la gestión de las residencias durante la pandemia de Covid-19 para acusar a los responsables de la Comunidad «jugar a ser Dios» y decidir «negarles a los mayores en residencias su derecho a ser atendidos en los hospitales públicos».
«Es tan grande su vergüenza, la página más negra de su Gobierno, que no hay mayoría absoluta que la pueda tapar y estoy convencida que acabarán respondiendo, aquí o en los juzgados, y mucho más pronto que tarde», ha sentenciado la política socialista.
Más madrid pide la dimisión de dávila
Por su parte, la diputada de Más Madrid Alodia Pérez Muñoz ha advertido a la consejera que «nada de lo que diga en la Asamblea» puede «tapar todos los escándalos» en las residencias y tras acusar a Ana Dávila de no estar «a la altura del cargo», le ha asegurado que «debería aprovechar y dimitir» junto con la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso --en referencia a la denuncia de la Fiscalía contra la pareja de ésta por presunta defraudación tributaria--.
Frente a estas críticas, la consejera ha lamentado lo «lejos» que el PSOE ha llegado con esta «infame táctica» de «difamar por encima de todo» para «intentar tapar las vergüenzas del peor gobierno de la democracia» porque «el fango les llega ya hasta el cuello».
«Han perdido lo más sagrado que puede tener un partido político, la palabra, la credibilidad y el sentido de Estado», ha asegurado Ana Dávila, quien ha sacado a relucir el 'caso Koldo' de presunto enriquecimiento ilícito por parte del que fuera asesor del exministro José Luis Ábalos, Koldo García, para subrayar que los socialistas «han traspasado todas las líneas rojas de la decencia y de la lealtad institucional».
Dávila se ha referido también a las críticas por la gestión de las residencias durante la pandemia para acusar a la oposición de llevar «cuatro años mintiendo» y «retorciendo el dolor» para «tapar la inacción de un Ejecutivo que no quería cerrar los colegios, ni los centros de mayores» ante la llegada del virus en 2020 --en alusión al Gobierno central-- y que «mintió con el Comité de expertos, negó material de protección» y «dejó abandonados a todos, incluyendo a las residencias de mayores, cuando más se les necesitaba».
Por otro lado, la consejera ha defendido que en esta primera ola del coronavirus se realizaron «más de 35.000 traslados» de mayores a hospitales en la Comunidad de Madrid, de ellos «11.200 de residencias», así como la distribución por parte del Ejecutivo regional de «doce millones de unidades de material y más de 175.000 medicamentos en los centros».
También ha respondido a las críticas sobre la situación en las residencias durante este periodo señalando que «se pusieron en marcha 28 equipos de Atención Primaria, 38 de hospitales y 26 de geriatras para dar asistencia sanitaria en las residencias».
Dávila subraya que "no se ha servido comida en mal estado"
En cuanto a la alimentación en estos centros, Dávila ha negado que se sirva «comida en mal estado» a los mayores y ha subrayado que «las más de 9.500 comidas» que se entregan cada día en los centros de la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) «son de calidad y lo saben», porque las que lo distribuyen «son las mismas empresas que contrata el PSOE a nivel nacional y allí donde gobierna». «Qué hipocresía», ha censurado la consejera.
Además, ha presumido de la creación de una Comisión de Menús en todas las residencias de la Comunidad de Madrid, así como de la puesta en marcha de «un programa pionero de mejora del servicio de restauración con 1.000 auditorías anuales», lo que supone «dos por centro».
Al margen de esto, ha destacado que «sólo en 2023 se han realizado 1.093 visitas de inspección en las 492 residencias de personas mayores de la Comunidad de Madrid» y «más de 5.800 inspecciones» en todos sus recursos, «un 20% más que el año anterior».
«Aunque ustedes intenten vender una situación de caos, Madrid tiene una planificación y control más exhaustivo y riguroso que la mayoría de las comunidades autónomas», ha defendido Ana Dávila, quien ha recordado que la región es «la primera en cobertura en centros de mayores» y «también de las primeras en ayuda a domicilio» o en «atención en centros de día». «Y la única que tiene centros residenciales específicos para Alzheimer», ha finalizado.
En medio de este debate, el diputado de Vox Ignacio Arias Moreno ha mostrado su «vergüenza» por el «lamentable espectáculo» ofrecido por sus predecesores en el uso de la palabra y ha rechazado el «revanchismo político» de la izquierda.
«Señores, la Justicia no la imparten los partidos. Ya sé que la izquierda, la extrema izquierda y el PP no lo tienen claro, porque se siguen repartiendo los jueces. La justicia la imparten los jueces y, por lo tanto, dejen y que sigan los jueces investigando», ha sentenciado el parlamentario de Vox.
Al hilo de esto, la diputada del PP Esther Platero ha acusado a los grupos de oposición de querer «politizar lo que pierden en los juzgados», recordando la cerca de una veintena de causas archivadas por la gestión de las residencias en la pandemia y ha tachado de «hipócritas» las críticas a la contratación con empresas sancionadas cuando esas mismas firman tienen concesiones con el Gobierno de España.
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