El Palma Futsal no sufre ante Osasuna Magna

Luan Muller recuperó la titularidad y el ataque buscaba el uno contra uno de Moslem o el juego con Tayebi en la posición de pivot, pero el partido comenzó a decantarse a favor del Palma Futsal gracias a sendos robos de balón. En el primero Chaguinha, se hizo con el balón tras aprovechar una falta de entendimiento entre Tony y Eloy y lo cedió a Rómulo quien, con el exterior, batía a Palazón. Y cuando la afición estaba celebrando el primer gol, llegó el segundo. Moslem le robaba la cartera a Fabinho y tras deshacerse del meta del equipo navarro con una pisada, marcaba a puerta vacía.

Ya se sabe que el 2-0 es un resultado un tanto traicionero, y más en un deporte tan dinámico como el fútbol sala. Y más si el conjunto de Vadillo da un paso atrás u Osasuna Magna uno hacia adelante. Martí pudo reducir las diferencia pero tras una Roberto Martil no pudo precisar su remate frente a Muller tras una gran pared con Dani Saldise, que fue homenajeado antes del inicio del partido. Vilian tampoco batió desde cerca a Palazón tras un rechace de Palazón y Bruno Gomes estuvo a punto de lograr el gol de la jornada pero su taconazo se marchó fuera por poco.

Estaba por ver si los jugadores se iban a ir al vestuario con una diferencia mayor o menor que ese 2-0. Tayebi la tuvo pero en el uno contra uno su picada se fue fuera justo al poste derecho de Palazón. Lo intentaba el equipo de Miguel Hernández, pero no creaba peligro a Muller mientras que el marcador se iba acercando al final de la primera parte. Cuando faltaban apenas dos segundos, un córner sacado por Marcelo lo remató Bruno Gomes dando una diferencia de tres goles que parecía insalvable dado lo visto en los primeros veinte minutos. El 3-0 parecía una diferencia abismal para el equipo rojillo, claramente inferior en una primera parte en la que el campeón de Europa, sin parecer que forzaba demasiado el acelerador, disponía de una cómoda ventaja que podía haber sido mayor de no haber estado tan acertado Palazón o de haber estado un poco más preciso el Palma Futsal en ataque.

Salió con otro brío el conjunto navarro que dispuso de dos ocasiones al inicio del segundo acto, abortadas por Muller, quien no pudo hacer nada ante el disparo raso de Tony dando algo de emoción al encuentro. Se volvía a esta diferencia de dos goles con muchos minutos por delante con un Osasuna Magna que no paraba de acercarse con peligro a los dominios de Luan Muller, aunque Palazón también estaba teniendo trabajo en algunas ocasiones y en otras la falta de acierto evitaba aumentar la diferencia con lo que permanecía la incertidumbre.

Quedaba el último cuarto del encuentro y Muller salvaba de forma milagrosa un disparo de Gerghty y poco después Miguel Hernández apostaba por el portero-jugador. Pero un robo de balón de Chaguinha obligó a Eloy a hacerle falta, que le costó la expulsión, lo mismo que a su compañero Roberto Martil por protestar. Con superioridad numérica, Rivillos sentenció el encuentro antes de que Saldise cerrara el marcador.