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Sebastián Viriato|CHICAGO
Los directivos y jugadores del Real Madrid vivieron la primera jornada completa de venta de imagen y camisetas en Chicago y el resultado fue un éxito rotundo ante la gran respuesta que dieron los miles de seguidores que ya tienen en la Ciudad de los Vientos. También tuvieron la oportunidad de hacer el primer contacto con el césped del Soldier Field para el entrenamiento oficial que permitió al entrenador brasileño Vanderlei Luxemburgo conocer el estado físico de los 24 jugadores que viajan con la expedición y decidir cual será el equipo titular para enfrentarse al Chivas de Guadalajara. Pero el apartado deportivo es lo que menos interesa a los aficionados de Chicago que quieren, como sucedía con el legendario Michael Jordan, estar cerca de las grandes figuras del Real Madrid para comprar sus camisetas y conseguir que se las firmen.

Una vez más, los seguidores del Real Madrid en Chicago acudieron también al Wrigley Field para que los capitanes les firmasen autógrafos, mientras que Zambrano tenía preparada su propia colección de camiseta y otros objetos esperando las firmas de Raúl, Guti y especialmente de Roberto Carlos, su ídolo desde niño. Luego iba a llegar el momento clave de la promoción del Real Madrid cuando Raúl hizo el primer lanzamiento del partido, algo que dentro del deporte del béisbol sólo esta reservado para los personajes muy especiales y distinguidos en todos los aspectos de la sociedad estadounidense. Raúl subió al montículo del segundo estadio más antiguo del deporte pasatiempo nacional en Estados Unidos y hizo un lanzamiento con estilo, pero la pelota se fue demasiada alta, lo que forzó que Zambrano tuviese que saltar para evitar que se le fuese por arriba.

Los promotores de la gira del Real Madrid también tiene el objetivo de sacar el máximo de provecho económico de su presencia y la primera actividad del equipo fue la de visitar un centro comercial, donde se vendían sus camisetas y en sólo una hora de presencia más de 300 fueron compradas por los aficionados. La labor de promoción de imagen iban a continuar, pero esta vez sólo les tocaba a los tres capitanes del equipo, Raúl González, José María Gutierrez «Guti» y el brasileño Roberto Carlos. Su misión era la de visitar el legendario campo de béisbol de los Cachorros de Chicago, el Wrigley Field, donde los iba a recibir el lanzador estelar venezolano Carlos Zambrano, un fanático y admirador de Roberto Carlos. Los tres jugadores del Real Madrid se enfundaron las camisetas y las gorras de los Cachorros para recorrer con Zambrano las instalaciones del campo, que tenía ya llenas las gradas con los fanáticos que iban a presenciar el partido de la competición regular frente a los Piratas de Pittsburgh.