La hiriente derrota encajada por el Mallorca en el Calderón minó el
optimismo de Cúper, pero no sus ganas de seguir peleando. El
técnico argentino apareció por la sala de prensa con un discurso
castigado por los cuatro goles del Atlético, pero con la intención
de dejar claro que no piensa arrojar la toalla hasta que las
matemáticas dejen sin opciones a los baleares. Con todo, el
preparador de Chabas no quiso mirar hacia otro lado y fue muy
contundente en sus palabras: «La cabeza me dice que estamos
jodidos, muy jodidos».
Cúper insistió el viernes en que la plantilla se había conjurado
para mostrar otra cara en Madrid, y así fue. Al menos, durante el
primer tiempo, en el que el Mallorca dispuso de opciones para
haberle atizado al conjunto de Ferrando. Sin embargo, después de
haber marrado esas ocasiones, Gonzalo Colsa anotó un gol afortunado
y el Mallorca inició un peligroso ejercicio de caída libre: «No sé
si ha sido demasiado castigo, pero está claro que tenemos un alto
porcentaje de mala suerte y eso no lo podemos cambiar. Ves al
equipo muy bien en el primer tiempo, en el que tienes el partido
casi controlado, pero es que nos sucede de todo», dijo resignado el
técnico. El argentino comentó que el gol de Colsa les hizo mucho
daño: «Colsa logró un gran gol, pero roza en alguien, que no sé
quién es, y entra. Luego todo se termina cuando te señalan el
penalti». A pesar de eso, Cúper quiso destacar la actitud del
equipo: «Quiero destacar el sacrificio que hemos puesto a lo largo
de todo el encuentro».
Complicado
La derrota a la orilla del Manzanares no le ha puesto una venda en
los ojos a Cúper, que, pese a destacar que el equipo se vació en el
Calderón, sabe que el Mallorca está en una situación muy delicada:
«La cabeza me dice que estamos jodidos, muy jodidos. Además,
tenemos graves problemas con los jugadores que hemos perdido,
porque tenemos tres menos para jugar ante el Zaragoza. Pereyra
porque ha visto la quinta amarilla y los dos centrales por la
expulsión. Tenemos otro argumento negativo para salir de este
momento», reconoció.
Cuestionado por si la hinchada mallorquinista se iba a conformar
con el hecho de que los jugadores hayan mostrado otra actitud,
Cúper comentó que «se nos presentó el primer tiempo para jugar bien
y ponernos por delante, pero tuvimos mala suerte en el primer gol.
Tuvimos dos claras ocasiones y no las aprovechamos. Está claro que
cuando encajas un 4-0 es difícil decirle a la gente que has perdido
porque has tenido mala suerte, pero cuando nos quedamos con nueve
jugadores ya todo estaba terminado».
Cúper también fue interrogado por los medios de comunicación de
la capital sobre si se arrepentía de haber aceptado el proyecto del
Mallorca, que parece ahora a la deriva: «No, yo no me arrepiento de
nada. Hay que asumir que cuando cogí el equipo tenía unas
expectativas de cambio, pero no hemos cambiado. Asumiremos el
fracaso si las cosas salen mal, pero ahora no es el momento». El
técnico también habló de los refuerzos que llegaron en el mercado
invernal, a los que no quiso culpar de la mala situación que vive
el conjunto bermellón: «La gente que ha llegado pensábamos que iban
a colaborar en que todo fuera bien, pero no podemos hablar de
fracaso de los jugadores que han venido. Si no, diríamos que ya
estamos en Segunda División y no nos vamos a rendir», concluyó.
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