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El segundo partido de la final de la Liga ACB, que tras la victoria del Barcelona en el primero es considerado por todos sus protagonistas como clave, podría desequilibrarse y decidir prácticamente el título en favor del cuadro catalán si Andre Turner, base del Caja San Fernando y jugador más decisivo del conjunto andaluz, no se recupera de los problemas físicos que le mantienen como duda. El concurso de Turner se presenta como obligado para que el equipo de Javier Imbroda aspire a una victoria en el Palau Blaugrana, aunque la plantilla sevillana tampoco está segura de poder contar con su segundo base, Salva Díez, aquejado de una fuerte contractura en el bíceps femoral y semitendinoso de la pierna derecha. El caso es que la recuperación de ambos jugadores, de producirse, no sería completa y la aspiración en estos momentos pasa por que puedan actuar al sesenta o al setenta por ciento de sus posibilidades. La situación extrema obligaría a Imbroda a jugar con Antonio Díaz como base, pese a que su experiencia en las eliminatorias por el título es de sólo diez minutos. De todos modos, esta solución o cualquier otra que pase por no contar con Andre Turner es considerada, a tenor de las estadísticas, como un factor que decantaría la balanza en favor del Barcelona.