El jugador del Atlético Baleares Víctor Pastrana intenta superar la entrada de un jugador del Mérida durante el partido que enfrentó a ambos equipos en el Estadi Balear. | Miquel Àngel Borràs

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La segunda vuelta apenas ha alzado el telón pero este domingo (12:00) presenta un duelo trascendental para el Atlético Baleares, que recibe en el Estadi Balear al Atlético Sanluqueño. Después de encadenar su segundo tropiezo consecutivo y dar un paso atrás en su progresión con una clara derrota ante el Real Murcia, los hombres de Juanma Barrero se enfrentan a un rival directo que marca la frontera de la salvación y cuenta con cuatro puntos de ventaja, por lo que los locales no pueden fallar.

La puja por la permanencia en el Grupo 2 de Primera RFEF vive este domingo un capítulo crucial para los intereses del Atlético Baleares, que quiere enjugar la renta de su adversario y volver a acercarse a una zona de salvación que ha visto como se escapaba después de enlazar cinco jornadas sin ganar en las que ha sumado tres de los últimos 15 puntos. Los balearicos no sólo tienen que recuperar su versión más competitiva sino que necesitan acabar con una sequía goleadora que supera los 360 minutos después de no haber visto portería en los últimos cuatro episodios del campeonato.

El Atlético Baleares aún no puede contar con su máximo goleador, David Rodríguez, que cumple su cuarto partido de sanción, para paliar el déficit de pegada que está acusando a lo largo del curso. Tampoco estará en la convocatoria otro delantero como Xisco Jiménez, que está en conversaciones para abandonar la disciplina de la SAD blanquiazul, mientras que se pierden el duelo ante el Atlético Sanluqueño David Forniés y Juanra por lesión.

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La progresión de Josep Jaume y la llegada de David Muñoz procedente del Rayo Vallecano elevan los recursos del Atlético Baleares, que también tendrá a un Nuha Marong con mayor ritmo tras incorporarse en el mercado de invierno para aumentar las posibilidades en una delantera en la que el extremo Roberto Alarcón ha estado asumiendo el papel de ariete.

Los blanquiazules son conscientes de que la salvación pasa por sacar adelante compromisos como los de este domingo y en general todos los partidos en casa. El club ha puesto entradas asequibles para los abonados con el objetivo de generar un gran ambiente en el Estadi Balear.

Enfrente estará un Atlético Sanluqueño que se impuso la jornada al Real Madrid Castilla y que el técnico del Atlético Baleares, Juanma Barrero, ve como un rival «agresivo, que se ordena mejor en la fase defensiva y que jugaba muy bien antes y ahora». «Meten mucha gente entrelíneas, con buen fútbol asociativo, que controla el juego directo y que es un equipo dinámico y en buena dinámica», ha valorado el preparador extremeño, que ha deseado que se cierre rápido el mercado de invierno y que lo haga con más llegadas a la disciplina blanquiazul, sobre todo, en la delantera.