El ciudadano que reside en Mallorca a veces olvida lo maravilloso de redescubrir la Isla. Volver a esos lugares que se visitaron en la juventud o aquellos a los que siempre se ha querido ir pero, por el motivo que sea, no ha ocurrido. Por ello, y a propósito de la designación de Los Pueblos más Bonitos de España en Mallorca, estas páginas quieren repasar brevemente estos municipios, y alguno que otro más, para inspirar esos días libres y de buen tiempo que adornan el mes de diciembre cada año. Además, el Puente de la Constitución está a la vuelta de la esquina y es la excusa perfecta para realizar alguna de estas propuestas y conocer lugares nuevos.
Fornalutx
En el corazón de la Serra de Tramuntana se encuentra este pueblo muy próximo a Sóller, al que estuvo unido hasta 1813, para después reconocerse sus derechos constitucionales como municipio independiente en 1837). Fornalutx disfruta de uno de los parajes paisajísticos más espectaculares de toda la Isla. Además, su arquitectura y entorno han provocado que sea un punto de interés turístico muy destacado. El casco antiguo de Fornalutx es una delicia para un paseo tranquilo a media mañana con el sol de invierno ambientando las calles. El recorrido nos puede llevar hasta su ayuntamiento, emplazado en el antiguo casal de Can Arbona y cuya torre defensiva es muy llamativa. Para llegar a ese punto se habrá pasado previamente por la Plaça d’España, con sus tradicionales bares y terrazas al cobijo de los árboles. Los amantes del senderismo tienen en Fornalutx un lujoso entramado con paisajes asombrosos que incluyen la Serra de Tramuntana como protagonista, de la que seguro no hará falta recordar que es Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Por mencionar algunas rutas, cabe señalar: Camí des Creuer – Biniaraix, Fornalutx – Sóller o Fornalutx – Mirador de ses Barques. Ninguna de ellas defraudará a nadie que aprecie la naturaleza y la riqueza cultural.
Alcúdia
En Alcúdia, municipio del norte de la Isla, hay experiencias para todos los gustos. Tratándose de un municipio costero no podía faltar el mar, para disfrutar de deportes acuáticos o chapuzones desde la primavera y hasta bien entrado el otoño. Con su larga extensión de arena blanca, kilométrica, ancha y con aguas poco profundas, es una de las playas preferidas por las familias. Además, cuenta con un sendero asfaltado para los más deportistas; caminar a buen ritmo, correr o pasear es muy común en la zona. El invierno, con la arena humedecida y compacta, invita a pasear cerca de la orilla, disfrutando de los rayos del sol y el sonido del mar. Aunque hay otras playas o calas también preciosas en el municipio, son conocidas las de Sant Joan o la de Aucanada, por poner algunos ejemplos.
Otra de las opciones que brinda Alcúdia es el senderismo, con varias rutas que recorren el municipio por su parajes más bonitos. Les recomendamos algunas como la Cala des Coll Baix, un recorrido circular desde es Morer Vermell; otro recorrido circular es la visita a la playa Coll Baix desde Port d’Alcúdia; y una tercera sugerencia podría ser subir a la Talaia desde el Morer Vermell. Un lujo de rutas y paisajes. Alcúdia es un lugar de historia. Grandes ejemplos son su muralla, actualmente restaurada y que le llevó a convertirse en Ciudad Fidelísima; y toda una cultura romana que yace a los pies de una iglesia, la de Sant Jaume, de estilo neogótico y construida en dichas murallas medievales. Es importante mencionar que parte de estas murallas, que rodean el casco viejo, se puede recorrer por la parte superior. Se encuentra muy bien conservada y se acompañan de calles estrechas y edificaciones con siglos de antigüedad.
Sobre su ciudad romana, Pollentia, cabe mencionar que en su día, y debido a su situación estratégica entre las bahías de Pollença y Alcúdia, llegó a ser la ciudad más importante de época romana de Baleares, con casi 20 ha. Actualmente se pueden visitar las áreas de la portezuela, el Foro y el Teatro. Además, Alcúdia conecta de forma directa con Menorca a través de los ferry y, en algunos casos, en poco más de una hora se puede estar en la isla vecina.
Pollença
A uno de los extremos de la Serra de Tramuntana encontramos Pollença. Un municipio también costero que guarda tanto encanto como los anteriormente mencionados. Galardonado con la insignia de Pueblo más Bonito de España, Pollença tiene diferentes opciones para ser disfrutada. Su casco antiguo, bien cuidado, nos conducirá a la Plaza Mayor, donde se puede admirar la arquitectura del siglo XVII de su parroquia. Además de tomar algo tranquilamente en la terraza de cualquiera de sus bares, la plaza es protagonista de muchas de las festividades del pueblo; es amplia y bonita.
Cerca, a diez minutos caminando, encontraremos el Calvari, que, como indica su nombre, es lo que le supondrá al viandante recorrer los 365 escalones que le llevarán a la cima. Allí, una pequeña iglesia del siglo XVIII nos dará la bienvenida y ofrecerá una panorámica de impactante belleza. Los senderistas también tienen mucho que descubrir en este municipio. El Puig de María es un recorrido familiar muy agradecido, sembrado de árboles que ofrecen sombra, y con una parte de asfalto y otra empedrara para la que hará falta un buen calzado que agarre. Arriba, la ermita y, nuevamente, unas vistas sensacionales que harán que el camino de algo menos de una hora bien merezca la pena. Otras rutas dignas de mención podrían ser el Puig de l’Àguila o el recorrido de La Mola.
Para los amantes del mar, el Puerto de Pollença está considerando como uno de los puertos deportivos más importantes de Mallorca. Allí, se pueden practicar muchas actividades acuáticas y coger catamaranes para recorrer la Isla o visitar Formentor. Las zonas de baño más visitadas en el municipio son la playa de Llenarie, cala Murta o cala Figuera. El Kitesurf es una modalidad muy practicada en la playa que une Alcúdia con Pollença.
Mallorca pueblos maravillosos
Nadie puede negar que estas tres joyas de la geografía mallorquina son los únicos pueblos que resaltan. Los turistas cada año lo demuestran con sus visitas a otros municipios como Valldemossa, Deià o Sóller, un conjunto de pueblos que se suelen recorrer el mismo día aunque cada uno de ellos da para mucho más. Lluc, en Escorca es otro de los top ten en visitas, como también lo son Santanyí, Banyalbufar, Estellencs, y un lárgo etcétera... Ya que todos los municipios tienen mucho que ofrecer al visitante.
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