Miles de personas han pedido en Palma que el Gobierno rectifique. | Cañellas/Ayuga

TW
12

Al grito de 'Rectifica Zapatero' , 'No nos mires, únete' o 'Manos arriba, esto es un atraco', cerca de 8.000 personas se dividieron en las tres manifestaciones que recorrieron ayer Palma clamando contra la política del Gobierno de Zapatero, pidiendo la rectificación de la reforma laboral y exigiendo que paguen por la actual situación económica los empresarios, banqueros y políticos imputados en casos de corrupción que han llevado al país a la crisis.

A pesar de clamar por la unión de los trabajadores durante el día de la huelga general, las diferencias entre los sindicatos de las Islas volvieron a ponerse de relieve y, finalmente, se formaron tres manifestaciones que recorrieron las principales calles de la capital palmesana dejando tras de sí gritos, pitidos y cientos de pancartas. Por un lado USO, por otro la CNT y la CGT y, por otro, la formada por UGT, CCOO y STEI-i.

Mínimos incidentes

Noticias relacionadas


La manifestación principal, organizada por los sindicatos UGT, CCOO y STEI-i, partió de la plaça Espanya, recorriendo las avenidas, el Passeig Mallorca, Jaume III, la calle Conqueridor para finalizar en la Plaça Major donde los principales dirigentes de estos sindicatos se dirigieron a los asistentes para felicitarles por su asistencia y asegurar que había contado «unos 20.000 participantes», al tiempo que recordaban que los trabajadores no iban a agredir a nadie, solo reivindicar sus derechos.

A pesar de que no hubo ningún incidente importante, hay que señalar que los comercios de la calle Jaume III cerraron sus puertas al paso de la manifestación y ante el aviso de varios participantes que se acercaban a los establecimientos para pedirles que echaran el cierre porque «había gente exaltada y podía pasar cualquier cosa». A pesar de ello, los trabajadores de El Corte Inglés tuvieron que ver como un grupo de manifestantes comenzaba a aporrear los cristales del centro comercial exigiéndoles que dejaran de trabajar al grito de «esquiroles».

Otro pequeño incidente a destacar fue el del 'encontronazo' de dos de las manifestaciones delante del Parlament, en la calle Conqueridor, que se solucionó formando dos pasillos para la manifestación principal y la de CGT y CNT que finalizaba en es Born.