La policía arrestó al sospecho tras la denuncia de la víctima. | Redacción Sucesos

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A la víctima, que regenta un bar en Palma, le había tocado la Lotería y F.C., de 42 años de edad y nacionalidad española, lo sabía. Tenía claro que iba a ser su objetivo. Entre julio y diciembre de 2017 consiguió que le entregara 82.780 euros bajo amenazas de todo tipo. Por ello, y acusado de un delito de extorsión, el imputado, que se encuentra actualmente en la cárcel por otros delitos, se enfrenta a una pena de cinco años de prisión. La Fiscalía solicita también que le devuelva la cantidad íntegra al perjudicado.

Pagos

Según relata el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación, los pagos del empresario al presunto extorsionador se iniciaron el 24 de julio de 2017. En esa fecha le hizo entrega de 1.200 euros. En agosto esta cifra alcanzó los 2.000 y en septiembre fueron 10.000. Así hasta alcanzar los 82.780 euros.

El sospechoso amenazaba con lesionar a su familia, causar destrozos en su vehículo e incluso colocar droga en el interior de su establecimiento. Ante esta situación, el hombre decidió acceder a las pretensiones de F.C. Hasta que un día dijo «basta». El 4 de enero de 2018 y ante una nueva exigencia del imputado, la víctima se negó. Le había pedido otros 3.000 euros. Y ese mismo día denunció los hechos ante la Policía Nacional. El acusado fue detenido el 16 de marzo, dos meses después.

Cuando parecía que la pesadilla había acabado, el presunto extorsionador volvió a la carga. Sobre las 13.30 horas del 24 de mayo de ese mismo año se topó con la víctima en la calle Manacor, de Palma, mientras este se encontraba en el interior de su vehículo. Se cruzó delante de su coche y volvió a exigirle una cantidad económica. «Dame dinero, dame dinero», le espetó. El hombre se negó y ante tal postura le amenazó. «Te vas a enterar, voy a buscar a veinte de Son Banya y te van a matar». La víctima logró huir del lugar.

Por todo ello, el acusado será juzgado próximamente en Palma acusado de un delito de extorsión y la Fiscalía pide para él cinco años de cárcel y que indemnice al empresario en 82.780 euros.