Francisco Tomás Fernández Cortés, ‘El Ico’, ante el club Cavalli. | Alejandro Sepúlveda

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Francisco Tomás Fernández Cortés, alias ‘El Ico', conocido delincuente y narcotraficante, confesó en sede judicial que se había convertido en un suministrador de armas de fuego, dinero, cocaína y prostitutas a policías de la presunta trama de corrupción policial.

El hijo de 'La Paca' dejaba su chalet a los agentes del GAP para que mantuvieran sexo con prostitutas.

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El juez Manuel Penalva recoge en un auto de prisión la declaración del hijo de 'la Paca': «El policía Carlos V. P. es muy peligroso porque siempre va armado. Venía frecuentemente al Cavalli (local regentado por ‘El Ico'), era muy violento, venía más a menudo para cobrar más veces y siempre las mordidas eran mayores que las de sus compañeros».

‘El Ico' también reconoció haber tomado ‘coca' con el citado Carlos V., en la discoteca Magic, entre otros lugares. Según la declaración de varios testigos, Carlos V. era el encargado de la noche del Arenal mientras que Nicanor hacía lo propio en los locales de Palma.

También explica que entregó a Tomás M., Carlos V. y a Nicanor un arma tipo veleta, una bayoneta y una granada de humo.