Manuel Jesús Grillé, teniente de alcalde y regidor de Policía Local de Calvià fue agredido en su despacho. | Jaume Morey

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Agentes de la Policía Local de Calvià y de la Guardia Civil procedieron a la detención de un vecino de Calvià en paro que abofeteó y amenazó con un cuchillo al teniente de alcalde y regidor de Policía Local, Manuel Jesús Grillé.

Los hechos se produjeron el pasado jueves, a las 19.15 horas, en el despacho del edil, ubicado en el polideportivo de Magaluf. Según consta en el atestado policial, «el arrestado, se personó en la oficina del teniente alcalde, en actitud intimidante y agresiva, posiblemente bajo el efecto del alcohol o drogas, le ha reclamado al Sr.Grillé que no le hubiera conseguido un puesto de trabajo, que ya que no le daba trabajo se iría al Ayuntamiento a cortarse el cuello, no entendiendo porque se le daba trabajo a un argentino y que lo iba a matar».

El arrestado, identificado como Manuel A.L., de 51 años y conocido popularmente como ‘el Sevillano’, se marchó del lugar y, minutos más tarde regreso portando en la mano un cuchillo de cocina de 16 centímetros de hoja gritando que buscaba al argentino para matarlo. Acto seguido, el presunto agresor se dirigió al despacho del regidor y comenzó a abofetearlo a la vez que le gritaba: «Hijo de puta, cabrón, sólo contratáis a inmigrantes», teniendo que ser sujetado por varias personas para evitar que siguiera agrediendo al político y darse a la fuga.

Inmediatamente, una patrulla de la Guardia Civil de Palmanova se personó en el lugar y consiguió recuperar el cuchillo.

Los testigos aportaron que el sospechoso era un varón de unos 50 años, de 1.70 de altura, pelo canoso, corpulento, vestido con camisa gris, pantalones piratas y chanclas. Una vez realizadas las pesquisas pertinentes, varias dotaciones de la Policía Local de Calvià se dirigieron a su domicilio particular.

Una vez allí, vieron que la puerta de la vivienda estaba abierta. Los agentes actuantes se identificaron como policías y entraron. El sospechoso, que se encontraba en el interior había intentado autolesionarse, momento en que éste salió corriendo desde la sala contra los agentes, al mismo tiempo que vociferaba: «Cabrones, pegarme un tiro que os voy a matar». En la mañana de ayer, el juez de guardia lo dejó en libertad con cargos y dictó una orden de alejamiento.