Más de 400 personas han tenido que ser desalojadas del hotel Tropical Park. | ultimahora.es

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La dirección del hotel Tropical Park, ubicado en la calle Mossèn Antoni Alcover de s'Arenal de Llucmajor, ha decidido cerrar el establecimiento hasta que se detecte por completo y se solucione la posible fuga de monóxido de carbono que se filtra a través del conducto del aire acondicionado y afecta a las habitaciones de la quinta planta.

Al parecer, esta fuga de monóxido de carbono procede de la caldera, aunque se está pendiente de que los técnicos revisen las instalaciones. El desalojo y cierre del hotel se acordó el viernes por la noche, después de que una turista de 14 años, alojada en la habitación 538 del establecimiento, fuese trasladada a Son Llàtzer ya que presentaba síntomas de intoxicación por monóxido de carbono. La menor recibió asistencia médica y horas después fue dada de alta. Parece ser que no estaba intoxicada y sufre migrañas que le provocaron el fuerte dolor de cabeza y problemas respiratorios. Sin embargo, era la tercera vez en apenas dos semanas que repetía la misma situación, aunque los dos casos anteriores han sido mucho más graves.

El pasado día 19, una joven rusa de 29 años alojada en la habitación 527 del hotel fue hallada muerta por una supuesta intoxicación de monóxido de carbono. Al cabo de tres días, otro turista francés de 25 años fue hospitalizado en estado crítico tras hospedarse en la misma habitación. Este joven fue hallado inconsciente por sus amigos y una ambulancia lo trasladó al hospital.

Los dos sucesos motivaron una investigación judicial que está en proceso. Después del tercer caso registrado el viernes por la noche, se ha descubierto la más que probable fuga de monóxido de carbono que se filtra a través del conducto del aire acondicionado. Por tanto se decidió el cierre del hotel.

El establecimiento tiene capacidad para 498 personas. El desalojo y reubicación de clientes comenzó a partir de las 23.00 horas del viernes. En ese momento había unos 300 turistas en el hotel. El resto fueron llegando por la noche y a lo largo de la madrugada y la mañana se ayer se fueron distribuyendo en otros establecimientos.

En una primera inspección se detectó un fallo de combustión en la caldera, por lo que se cortó el suministro de gas a todo el establecimiento. Esta semana los responsables esperan resolver el problema.