Tras la llegada al ayuntamiento de la Policía Local y de la
Policía Judicial de la Guardia Civil, se comprobó que unos
desconocidos habían trepado de madrugada por la fachada de la casa
consistorial hasta el balcón del primer piso, donde se encuentran
los despachos del alcalde, su secretaria, y el teniente de alcalde,
Rafel Torres. Tras forzar la persiana que da a éste último despacho
y conseguir entrar en el edificio, violentaron también la puerta
del despacho del alcalde, y registraron varios cajones de su mesa y
un armario.
El propio Pere Rotger explicó tras el susto de buena mañana que
«no se han llevado nada de valor y no he apreciado tampoco que
falte algo en especial ni que hayan hecho destrozos aparte de las
puertas. Por lo que me han contado también han ido hasta el área de
Tesorería y han intentado forzar una caja fuerte, sin éxito». Sobre
la alarma que puede causar en la ciudad que los asaltantes se
atrevieran a entrar en el mismo ayuntamiento, el alcalde manifestó
que «esto no significa nada más que todos podemos ser víctimas de
los delincuentes y ahora nos ha tocado a nosotros». El hecho de que
no sustrajeran nada del interior de la casa consistorial también
levantó algunas suspicacias, en el sentido de que los desconocidos
igual no buscaban dinero. El capitán de la Policía Judicial de
Palma se desplazó personalmente a Inca, con su equipo, para
investigar el caso. También participa en las diligencias la Policía
Judicial de Pollença.
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