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En la edición de hoy desvelamos que en el poblado de Son Banya ya se puede comprar fentanilo mezclado con cocaína, a un precio de 60 euros el gramo. Este opiáceo es una droga tremendamente peligrosa, que está causando estragos en Estados Unidos y otros países, y que convierte a los adictos en auténticos ‘muertos vivientes’. Las redes sociales están repletas de vídeo y fotos de estos consumidores, que caminan entre espasmos, como ‘zombis’ de películas. En ciudades como Los Ángeles o Fidadelfia se trata ya de una pandemia, de una crisis sanitaria sin precedentes que se cobra cada año la vida de miles de jóvenes y no tan jóvenes. Los efectos secundarios del fentanilo son tan fuertes -es 100 veces más potente que la morfina- que los yonkis que se enganchan prácticamente no pueden librarse de ese infierno. A Mallorca ha llegado de la mano de clanes colombianos, que empiezan a controlar parte del negocio del negocio del narcotráfico, que antes manejaban en exclusiva algunas familias gitanas de Son Banya.

Quejas de consumidores

Lo más llamativo es que el fentanilo es tan potente que los vendedores del poblado ya han recibido quejas en este sentido. Otros ni siquiera saben que la ‘coca’ que han comprado ha sido mezclada con el opiáceo. Los expertos policiales consideraban que solo era cuestión de tiempo que esta droga sintética, que tiene un uso legal cuando es recetada por un médico, pudiera ser consumida en el mercado negro mallorquín, tal y como ha pasado.

Más riesgos

Con todo, no es el único estupefaciente que puede ser mortal que se vende en aquellas chabolas. La cocaína rosa, o tusi, está muy de moda, pero ya hay constancia de que mezclada con bebidas energéticas puede provocar una sobredosis mortal al instante. Ante este panorama, solo cabe esperar que el buen hacer policial limite la actividad de estos clanes.