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Sucede dos veces al año, el 11 de noviembre y el día 2 de febrero, y siempre que las nubes no impidan que el rosetón monumental que preside el altar mayor del templo de la Catedral de Mallorca, se proyecte sobre la parte interna de la fachada, justo debajo del rosetón. Se conoce popularmente como el 'vuit de la Seu', al que se denomina la Fiesta de la Luz.

Un espectáculo lumínico que atrae la atención de cientos de personas que una hora antes aguardan y aprecian como el reflejo va avanzando hasta completar el efecto matemático. A las 7.30 horas de esta mañana se abrían las puertas de la Seu y ya eran muchos los que aguardaban para poder entrar. Una hora más tarde, más de 1.300 personas apreciaban, en silencio, como los colores de los 1.115 vidrios del rosetón monumental se reflejaban y recorrían la parte alta del interior de la Catedral. Para muchos era la primera vez que contemplaban el maravilloso espectáculo, entre ellos el alcalde de Palma, Jaime Martínez, de manera discreta quien señalaba.

Momentos antes de completarse el efecto lumínico. | Julián Aguirre
Momentos antes de completarse el efecto lumínico. | Julián Aguirre

A las nueve de la mañana, se completaba el efecto lumínico y algunos de los asistentes aplaudían, mientras que la inmensa mayoría captaban tan esperado momento con sus teléfonos móviles, instantes después se hacían selfies y fotos de recuerdo. El efecto, también se puede apreciar uno o dos días antes y después, pero no es tan concurrido.