Vista del Rising Sun. | Julián Aguirre

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Hay una frase que dice que ‘lo mejor en esta vida es tener un amigo con barco’. Y si este amigo es David Geffen y el barco es el Rising Sun, de 138 metros de eslora, entonces es como si te tocara la lotería.

Este productor musical norteamericano, que pasó de estar a punto de casarse con Cher a hacer pública su homosexualidad y convertirse en uno de los gais más influyentes del mundo, es un enamorado de Mallorca e Ibiza, y disfruta invitando a sus amigos celebrities a su superyate, cuyo nombre parece estar predestinado para disfrutar de los amaneceres más espectaculares.

El Rising Sun es un palacio flotante, pero son tantos los amigos de Geffen que debe alojar a sus huéspedes por turnos, ya que la embarcación sólo cuenta con 9 camarotes para sus invitados, unos 18, aunque a este número hay que añadir las más de 50 personas de tripulación alojadas en las 26 cabinas. Parte de este personal está al servicio exclusivo para proporcionar a los pasajeros la máxima comodidad posible. Para ello, dispone de una cancha de baloncesto que se localiza en la popa, sala o gimnasio. Además, el barco está dotado de un generador de energía cuya potencia podría asegurar el abastecimiento de una población de cincuenta mil habitantes.

En sus tres cubiertas se distribuyen salones y comedores con un estilo moderno, aunque son escasísimas las imágenes que se tienen de su interior. Uno de los aspectos que resultan más espectaculares es la gran cantidad de embarcaciones auxiliares y de recreo que puede albergar en la popa, que cuenta con dos enormes portalones. Motos de agua, lanchas tipo zodiac, piraguas, no falta de nada para que los invitados disfruten en el mar. Para que tengan una idea del ‘poderío’ del Rising Sun, resulta que la embarcación auxiliar, que sería el sueño de muchos y que sirve para transportar cómodamente a una veintena de pasajeros hasta tierra firme, también cuenta con su propio geolocalizador.

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Nada se escapa al que es la duodécima embarcación a motor privada más grande del mundo, ranking que está encabezado por el Azzam, del jalifa bin Zayed bin Sultan Al Nahayan, de Emiratos Árabes Unidos, que mandó construir uno de 180 metros. Para los interesados, se chartea.

La conexión con Rafael Nadal

El primer propietario de este superyate fue Larry Ellison, CEO de Oracle. Dicen que cuando se estaba construyendo rivalizaba en tamaño con el que le estaban diseñando a Paul Allen (Apple) y no paró de aumentar su tamaño hasta que se aseguró que era mayor que el de su competidor.

Ellison compartió la propiedad del barco entre 2006 y 2010 con Geffren, y ese año le vendió su parte. Ellison es dueño del Masters 1000 de Indian Wells y suele alojar en su casa a Rafael Nadal durante el torneo, con quien mantiene una excelente relación personal.