El plan de Agama afecta a seis vaquerías de Mallorca.

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Las reivindicaciones del sector agrícola a raíz de la crisis del sector vacuno ha tenido las primeras respuestas por parte del Govern. El conseller d’Agricultura, Joan Simonet, anunció ayer en sede parlamentaria que su departamento ha iniciado el diseño de un plan de ayudas específicas para cubrir los costes de transporte hacia la Península o hacia otras islas del excedente de leche que tengan las vaquerías.

Esta era una de las medidas que el pasado viernes las cuatro organizaciones agrarias (Asaja, Unió de Pagesos, UPA y Cooperatives Agroalimentàries) puso encima de la mesa como posible solución a la decisión de Agama de reducir en un 40 % el volumen de leche que compra a los ganaderos. Simonet, hizo estas declaraciones a raíz de una pregunta de la diputada socialista Carol Marquès, para conocer las medidas que impulsa el Govern en este sentido. El conseller añadió también que la Conselleria mantiene «un contacto directo y constante» con los ganaderos afectados y sus representantes sectoriales.

«Independientemente de los acuerdos que otros operadores ya han puesto sobre la mesa, la Conselleria trabaja en los ejes esenciales que los ganaderos nos han pedido a corto plazo». Entre estas medidas está el control del cumplimiento estricto de la cadena alimentaria; el inicio del plan para crear unas ayudas específicas para el transporte, así como «colaborar con los Consells con el cumplimiento del mínimo de consumo de producto local, tal y como marca la ley turística».

Por otra parte, Simonet recalcó que la semana pasada tuvo una reunión con Agama donde se les transmitió la total disconformidad con esta política de reducción. «La opción que tendría que apostar un grupo como Damm es la intensificación de la promoción de los productos y el control de sus precios de venta pública que son bastante caóticos», sentenció.