Una reunión entre el conseller insular de Presidència, Antoni Fuster, y la junta gestora de los Antics Blavets, formada por Llorenç Gelabert, Biel Ferragut y Tomeu Serra, fue el inicio del desbloqueo de la situación. Gelabert ha explicado que «el conseller Fuster entendió que el principal obstáculo se encontraba en las medidas que Emergències exigía para poder hacernos cargo de todos los recorridos desde los 45 pueblos participantes».
Finalmente, la solución que se ha adoptado consistirá en que cada responsable de agrupación de los municipios implicados rellenará una ficha que se entregará a Emergències y en la que tendrán que responder a las distintas medidas de seguridad y protección que se pondrán en marcha a lo largo de su propio recorrido. Por su parte, los Antics Blavets se harán cargo del tramo entre Inca y Lluc, además de correr con todas las cuestiones relacionadas con los seguros de todos los recorridos.
Llorenç Gelabert relata que «la pasada semanas organizamos un almuerzo con los caps de poble para anunciarles que finalmente se podría recuperar la Pujada a Lluc de la Part Forana con el mismo formato que la ha hecho tan popular a lo largo de estos 42 años de existencia. Una vez solucionado el asunto, me atrevo a decir que hay una gran ilusión entre los organizadores para que la Pujada de este año sea histórica». También tiene palabras de agradecimiento «tanto para el anterior gobierno del Consell de Mallorca como para el actual, que entendieron que nosotros no podíamos adaptarnos a las exigencias que se nos hicieron desde Emergències del Govern».
Cabe recordar que la autorización para poder realizar la Pujada la otorga el Servei General d’Activitats Classificades del Consell, tras dar el visto bueno al informe emitido desde Emergències del Govern. Las enmiendas de Emergències al plan de seguridad presentado en 2022 creaban precedente para este 2023 y entre ellas figuraba la prohibición de ir por carreteras abiertas al tráfico, informes de itinerarios y rutómetro, fase lunar, afluencia exacta de participantes,...
El conseller insular de Presidència, Antoni Fuster, ha relatado que «la Pujada a Lluc se ha convertido en uno de los eventos más populares y participativos del verano en la Part Forana. Es una oportunidad para poder disfrutar de nuestra naturaleza, del deporte, de la cultura y de la compañía del resto de participantes». El Consell es el principal patrocinador del evento con una aportación de 55.745 euros.
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