Recreación de un velero de transporte. | Veer Voyager

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Alcúdia Tech Mar, como plataforma para la innovación y la descarbonización del mar, ha proyectado la construcción de un velero construido enteramente de aluminio naval que, además de aprovechar la fuerza del viento, contará con una motorización eléctrica y de hidrógeno, con un motor principal y dos secundarios. Estos dos últimos funcionarán como generadores eléctricos cuando la embarcación navegue a vela.    De este modo, la embarcación sería plenamente sostenible, con cero emisiones e, igualmente, un balance energético de consumo cero.

Bartomeu Rosselló, de Alcúdia Tech Mar, explica que «se trata de un proyecto de tecnología absolutamente puntera, ya desarrollada en el norte de Europa, que podrá servir para el transporte de mercancías en el ámbito del Mediterráneo occidental, en lo que sería una recuperación del cabotaje costero tradicional. Su capacidad de carga sería la de dos contenedores convencionales a través de unos módulos específicos y una de sus grandes ventajas es que podría recalar en puertos pequeños».

Transporte

La embarcación tendría unos 40 metros de eslora y serviría para el transporte de productos locales a una velocidad de 10-15 nudos. Para Rosselló, «con un máximo de tres días de navegación a vela, podríamos considerarlo un transporte de kilómetro cero. Un producto ecológico podrá serlo hasta el final y no como ahora, en que la logística de contenedores y tráfico rodado implica impactos, además de mayores costes y más tiempo dedicado al transporte porque está obligado a seguir rutas ya establecidas.    El velero también puede ser aprovechado como buque escuela y de representación institucional» explica el responsable de Alcúdia Tech Mar.

El astillero para la fabricación del primer velero se situará en un espacio del Port d’Alcúdia alquilado por el Ajuntament a la Autoritat Portuària. El proyecto está pendiente de obtener financiación de los fondos Next Generation y, en caso de lograrlos, se convertirá en «el primer velero podría ser una realidad antes de un año», según Bartomeu Rosselló.