La futura ronda debe empezar en la rotonda de entrada a sa Ràpita desde Campos.

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El Pla de Mobilitat Urbana Sostenible (PMUS), realizado por el Ajuntament de Campos y presentado hace un año a la Comissió Balear de Medi Ambient del Govern, deberá volver a pasar el trámite de impacto ambiental. Así se ha acordado después que el Consistorio campaner haya decidido incluir la variante entre sa Ràpita y s’Estanyol dentro del PMUS. Desde el Govern se indica que la inclusión de este proyecto supone «una modificación substancial y, por tanto, se deben analizar los posibles efectos sobre el medio ambiente» que una infraestructura de este tipo supone.

En el primer estudio realizado por la Comissió Balear de Medi Ambient se indicaba como «positiva» la eliminación por parte del Ajuntament de Campos de la construcción de la ronda por la parte superior del núcleo urbano de sa Ràpita. Una retirada que la alcaldesa de Campos, Francisca Porquer (PP), se apresuró a desmentir indicando que el Ajuntament en ningún momento había renunciado a la construcción de la ronda.

Mientras, por su parte, desde el Govern balear aseguraban que en el PMUS presentado por el Ajuntament de Campos no existía la nueva carretera y que por tanto reclamaban al Consistorio que instase «al Consell para que la elimine del Plan director sectorial de Carreteras para que con la aprobación definitiva de la revisión del PGOU no las tenga que corregir». Ahora, un año después el PMUS debe volver a pasar el mismo trámite.