Fiestas y eventos sin residuos. Hace unos años algunos ayuntamientos comenzaron a distribuir entre los bares vasos reutilizables, como el de la imagen, diseñado por el Ajuntament de Consell, para reducir los de un solo uso en las ferias y fiestas. El objetivo es celebrar eventos sin residuos.

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Cada uno de los 53 municipios de Mallorca cuenta con, por lo menos, un punto verde y algunos ofrecen, además, áreas de aportación para depositar las basuras aquellos ciudadanos que residen en zona rústica. Pero de los 55 puntos verdes que existen en la Isla, solo 12 tienen la autorización para operar, al haberse adaptado a todas las normativas estatales y europeas de gestión de residuos. Otros 12 ayuntamientos las están tramitando, pero aún existen 33 instalaciones municipales para la recogida de residuos que funcionan sin esta regularización.

Impulso a los ayuntamientos

La Conselleria de Medi Ambient ha abierto una nueva línea de ayudas por valor de 2,3 millones de euros destinada a impulsar a los ayuntamientos a realizar mejoras que les permitan adaptar sus instalaciones a la Ley 8/2019 de Residuos y Suelos Contaminados. El director general de Residus i Educació Ambiental, Sebastià Sansó, convocó a los responsables municipales para detallar las iniciativas que son subvencionables. Entre las más novedosas están la adquisición de material para celebrar eventos con residuo cero, como vasos y vajillas reutilizables, la retirada de amianto de edificios públicos, la construcción y mejora de puntos verdes o las deixalleries móviles para recoger pequeños objetos (pilas, bombillas, cartuchos de tinta, etc...). Este servicio ya funciona en Inca, donde la legislatura pasada se construyó uno de los puntos verdes más modernos de la Isla. También lo es el de Mancor, con un novedoso sistema de apertura para los usuarios fuera del horario. Otras iniciativas que pueden acceder a estos fondos son aquellas que fomentan el reciclaje, la elaboración de compost y la recogida selectiva de textiles. Los ayuntamientos tienen hasta el 25 de septiembre para solicitarlas.

Sansó destaca que «con la normativa estatal que acaba de entrar en vigor, marcada por la UE, pronto todos los residuos deberán tener una trazabilidad desde su origen hasta su destino, y será imprescindible que todos los puntos verdes estén autorizados. No hay mano dura con los que no lo están porque las consecuencias serían peores».