Jaime Martínez y Fulgencio Coll escenificaron el acuerdo en Cort.

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En el Ajuntament de Palma existe una comisión de Hisenda en la que, entre otras funciones, los diferentes partidos van debatiendo las cuentas municipales anuales y sus posibles enmiendas. Sin embargo, tras el acuerdo programático entre el PP y Vox, por el que los segundos garantizan el apoyo desde fuera a un gobierno en minoría, se creará también una Subcomisión Municipal de Control Presupuestario bipartita. Su función será que los dos partidos de derechas acuerden las cuentas antes de llevarlas a pleno, para garantizar así su viabilidad.

Es una de las medidas de mayor control y peso de las 95 pactadas con la formación de Fulgencio Coll. Su principal defensor, y quien tiene el encargo de presidir la comisión, es el regidor Ignacio Esteban, licenciado en Ciencias Económicas y auditor de cuentas jubilado. Esteban ve en este nuevo órgano una manera de «trabajar de forma conjunta y de no tener que presentar enmiendas en el pleno». Es decir, Vox quiere dar el visto bueno a las cuentas anuales de Palma, antes de su tramitación y aprobación formal.

La idea de este grupo político es que la comisión, todavía por crear (los acuerdos se firmaron el pasado jueves), empiece a andar tras el pleno de septiembre, pues los presupuestos deben tener luz verde antes de que acabe el año y hay varios puntos, o «grandes partidas» que deben empezarse a tratar.

Para Vox, las más importantes pasan por una reducción de impuestos capaz de ser equilibrada con los gastos, tal y como marca la ley. Para ser más específicos, «queremos que se bonifique un 95 % la plusvalía municipal que afecte a las sucesiones y donaciones y reducir el impuesto del 25 % actual al 18 %, como estaba antes», aclara Esteban, quien incide que en este tema «ya hay un acuerdo porque ya está firmado».

La «gran batalla», intuye el regidor de Vox, será el control de los gastos porque «hay que analizar las subvenciones que se dan, si son necesarias, en qué cantidades y si se cumple su finalidad», advierte.

Sobre esta cuestión, el alcalde, Jaime Martínez, sólo aclaró que «los presupuestos tienen un horizonte a corto plazo, deben aprobarse antes de finales de año, y [la subcomisión bipartita] es uno de los temas que están sobre la mesa. Las cuentas deben consensuarse y están ligadas a los 95 puntos».

Consejos de Administración

Otra de las medidas que hacen ganar peso a la formación de extrema derecha en Cort es el cambio en la representatividad de cada partido dentro de los consejos de administración de las empresas públicas. Si hasta el momento en estos órganos la mayoría de los representantes eran del partido con más votos, ahora se respetarán los resultados de las votaciones electorales, con una representación similar a la de la sala de plenos. Esto significa que tanto PSOE como Vox ganan personal en el control de las empresas públicas. La medida es una de las más aplaudidas por el grupo ultra conservador que lleva tiempo luchándola.