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AGENCIAS/TENERIFE
El buque negrero «Marine I» será hundido a 3.000 metros de profundidad en alta mar en las aguas de Canarias tras haber sido remolcado hasta Santa Cruz de Tenerife por la embarcación de Salvamento Marítimo «Luz de Mar», la misma que fue en auxilio de los inmigrantes cuando lanzaron su SOS. La embarcación entró en el dique del puerto canario sobre las nueve de la mañana de ayer, para ser inspeccionada por funcionarios de la Capitanía Marítima de la capital, según señaló el capitán marítimo Antonio Padrón, que además explicó que el estado exterior del barco es «deplorable».

El presidente del PP, Mariano Rajoy, anunció ayer en Valencia que el próximo miércoles preguntará en el Congreso al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, por el «trato vejatorio» padecido por el centenar de policías nacionales destacados en Mauritania que ayudaron en las tareas de identificación y repatriación de los inmigrantes del buque negrero «Marine I». Además, sostuvo que si no obtiene una respuesta satisfactoria pedirá un pleno extraordinario para tratar este asunto. Asimismo estimó de «enorme gravedad» el «trato vejatorio y denigrante», así como el «abandono» dado a esos cien agentes nacionales por parte del Ejecutivo central. De la Vega contestó agradeciendo a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado su labor en Mauritania y reconociendo «una vez más el trabajo difícil» de estos agentes respecto a un «tema tan delicado y complejo como es la inmigración».

El buque está oxidado y no reúne ni siquiera los métodos de salvamento obligados. Según Padrón, tras la inspección, se le limpiará y se le desinfectará para hundirlo en alta mar. A pesar de las condiciones en las que se encuentra, la travesía hasta Canarias se realizó sin ninguna incidencia aunque se temía que podría producirse alguna debido a la vía de agua que presenta en el casco.

Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, no tardó en contestar a Rajoy y durante su habitual comparecencia tras el Consejo de Ministros señaló que el Gobierno «siempre» desea que todos los colectivos trabajen en las mejores condiciones, aunque «a veces» las circunstancias para su ejercicio son «difíciles».

Rajoy manifestó además en rueda de prensa que la situación vivida en los últimos días con el barco ha supuesto «un catálogo de despropósitos y un monumental ejemplo de incompetencia» del Gobierno.