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PSOE y ERC mostraron ayer su satisfacción por la primera reunión para negociar los Presupuestos para 2005, un encuentro en el que han constatado su voluntad común de aprobar unas cuentas públicas de marcado contenido social y de negociar un pacto para todo el ejercicio que garantice estabilidad al Gobierno.

Así lo explicó Rubalcaba, quien tras la reunión comentó que el PSOE tiene previsto celebrar encuentros similares con prácticamente todos los grupos parlamentarios y mostró su «optimismo» en conseguir un respaldo mayoritario para los Presupuestos, sin descartar ampliar la negociación para conseguir un acuerdo que englobe leyes que está previsto debatir durante este próximo año.

El portavoz socialista en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, y los portavoces de ERC, Joan Puigcercós y Joan Tardá, se reunieron durante casi dos horas para estudiar las propuestas de ambos grupos, y se centraron básicamente en aquellas materias de carácter económico y social, prioridades en las que ambos grupos coinciden con el Gobierno.

Rubalcaba destacó que para el PSOE la reunión ha resultado «satisfactoria», ya que se ha constatado que «existe una voluntad de acuerdo» entre ambos y coincidencia en las prioridades que se fijan de cara a los Presupuestos, que quieren que sean «de marcado contenido social».

Explicó que en este primer encuentro se han abordado fundamentalmente temas relacionados con la mejora de las pensiones y ayudas a las personas dependientes, propuestas de mejora para autónomos, PYMES o el sector turístico, y ayudas y compensaciones a comunidades autónomas y ayuntamientos que actualmente asumen los problemas derivados de la inmigración.

El portavoz socialista aseguró que su grupo ha «tomado nota» de otras ideas presentadas por ERC. Entre ellas se encuentra la propuesta de los catalanes de llegar a un acuerdo más allá de los Presupuestos del Estado que garantice que las leyes que se van a tramitar este año no «desborden» las cuentas públicas, pacto en cuya negociación «a priori, estamos dispuestos a avanzar». «El PSOE no pondrá ningún obstáculo para esa negociación», reiteró Rubalcaba.

Por su parte, Puigcercós subrayó la «buena disposición» que ha observado por parte del PSOE y las coincidencias en muchas de las materias, especialmente en las sociales.