El 'conseller en cap' de la Generalitat de Catalunya, Artur Mas,
anunció ayer la reforma del Estatuto de Autonomía, que presentará
en marzo, coincidiendo con el 23 aniversario de las primeras
elecciones democráticas al Parlamento autonómico. El sucesor de
Pujol aseguró que, si el Gobierno acepta la reforma, CiU estaría
dispuesta a entrar en el Ejecutivo central, como le ha propuesto en
varias ocasiones el PP.
«Renovación ante una situación de estancamiento». Eso es lo que
propone Mas en la búsqueda de mayor autogobierno. El 'conseller en
cap' presentará en marzo una propuesta que busca «escribir hoy el
Estatut de Catalunya de hoy y de lo que queremos que sea la
Catalunya de mañana». Se trata, dijo, de «un compromiso para toda
la vida» que nada tiene que ver con que haya elecciones autonómicas
el próximo año.
«No hemos conseguido que España se articule como un auténtico
Estado de estructura y espíritu plurinacionales», lamentó, y es por
eso por lo que es necesario un nuevo Estatuto que «supere el marco
actual». El objetivo de CiU, dijo, es recuperar el espíritu del
pacto constitucional, basado, en «la mutua comprensión, la
generosidad y el reconocimiento de la existencia» de realidades
nacionales.
Mas dijo que la reforma estatutaria nace de «la irrenunciable
determinación» de lograr «una Catalunya sin límites y que no
renuncia a nada». Eso sí, aseguró que esta reforma conlleva un
riesgo. «Si la propuesta fuera finalmente aceptada, en Madrid se
nos pedirían contrapartidas de implicación en la política española
más allá de las asumidas hasta ahora».
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