El diputado de Vox en el Parlament, Agustín Buades. | M. À. Cañellas

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El diputado de Vox Agustín Buades, uno de los cinco que votó la expulsión de dos del grupo parlamentario (el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, y la presidenta del partido en Baleares, Patricia de las Heras), ha asegurado este lunes: «Presentaremos a uno de los cinco como futuro presidente». «No hemos querido irnos de Vox en ningún momento; hemos sido conscientes de todas las variables que había», ha dicho Buades este lunes en la tertulia política del programa 'Al dia IB3' de la radio autonómica, donde ha insistido en que la expulsión de los dos diputados del grupo «ha sido una decisión muy dolorosa, muy meditada y muy consciente».

Los cinco diputados que expulsaron a los otros dos son el propio Buades, Idoia Ribas, Sergio Rodríguez, Manuela Cañadas y María José Verdú. El diputado ha defendido que la decisión que adoptaron es democrática y cumple el Reglamento de la cámara, la ha justificado por «pérdida de confianza» y la ha atribuido «al juego democrático». Según Buades, «se quiere hacer creer que aquí hay un follón de muchísimo cuidado, simplemente hay un grupo parlamentario que ha echado a dos diputados», algo que ya ha sucedido anteriormente, ha afirmado y ha criticado que Le Senne se mantenga como presidente: «Estamos en una agonía pero tarde o temprano, porque los letrados lo van a decir muy claro, el presidente tiene que cesar porque así lo dice el Reglamento y hay que elegir a otro presidente».

«Nosotros garantizaremos el cumplimento de los 110 puntos que firmó nuestra portavoz, Idoia Ribas, en julio y tenemos la mano tendida a Vox España para arreglar ese problema», ha dicho Buades sobre lo que ocurrirá en esta crisis y sobre el acuerdo de gobernabilidad con el PP, que gobierna en solitario, pero tiene 25 diputados y requiere otros 5 para alcanzar la mayoría en el Parlament. Ha negado que sean tránsfugas: «Yo sigo siendo de Vox hasta que no haya una resolución total». Y ha subrayado que sigue defendiendo «las mismas ideas de Vox» y garantizando «la estabilidad» del Govern, al estar dispuestos a cumplir los acuerdos de investidura.

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Por su parte, el portavoz parlamentario del grupo popular, Sebastià Sagreras, ha asegurado que el PP trabaja «en el escenario de que Vox se acabe recomponiendo y reconciliando, que sigan con los acuerdos de investidura firmados, con los diputados necesarios para garantizar la estabilidad y el PP elegirá de presidente, si es este escenario de que Vox garantiza la investidura, la propuesta de presidente que se proponga». Ha insistido en que «la situación óptima sería que fueran capaces de reconducir la situación, reconciliarse y estar en disposición de cumplir los acuerdos de investidura con los diputados necesarios para seguir aprobando las normas que se están poniendo en marcha desde el principio de la legislatura».

La socialista Mercedes Garrido ha criticado que los problemas internos de Vox «afectan gravemente a la gobernabilidad de Baleares» porque «el PP tiene 25 diputados en el Parlament, se necesitan 30 para poder llevar adelante las políticas» y ha rechazado que «no le queda más remedio que ponerse en manos de unos tránsfugas, los 5 miembros que han sido expulsados de su partido». Ha advertido además de que el Consell de Menorca no tiene presupuesto y el gobierno del Consell de Mallorca «depende de Vox», como sucede en ayuntamientos como los de Palma, Alcúdia, Calvià y Marratxí.

El portavoz del grupo parlamentario MÉS per Mallorca, Lluís Apesteguia, ha defendido la propuesta de reforma que ha planteado, para que los cinco diputados de Vox sean expulsados de ese grupo. «Podríamos decir que están en proceso de transfuguismo y que una persona sí presida el Parlament es gravísimo desde el punto de vista institucional; defenderemos que nadie de Vox ha de presidir el Parlament», ha insistido.

El diputado de MÉS per Menorca Josep Castells considera que, tras lo ocurrido, los diputados de Vox no están legitimados para representar a quienes les votaron por haber sido incapaces de solventar sus diferencia y ha afirmaod que «estas salidas testoterónicas hacen un flaco favor a la política».