Un tono mucho más conciliador. La portavoz de los críticos, Idoia Ribas, y el president del Parlament, Gabriel Le Senne, realizaron este viernes declaraciones a los medios de comunicación con un tono mucho más conciliador que el de días anteriores. Le Senne dijo que es preciso calmar los ánimos para bajar la tensión. | Jaume Morey

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Los dos sectores de Vox están más cerca de cerrar finalmente un acuerdo y volver a la casilla de salida. Sobre la mesa están cambios orgánicos en el partido y hasta la posibilidad de que haya un relevo interno en la Presidència del Parlament. El sector oficial insiste en que Gabriel Le Senne es la única opción posible, pero al mismo tiempo tampoco puede descartarse del todo que termine habiendo un relevo pactado.

Los dos sectores siguen en conversaciones con la mediación del equipo de Ignacio Garriga, sin la intervención directa de Santiago Abascal que, sin embargo, sigue muy atento al desarrollo de los acontecimientos. Los críticos apelaron ayer a la cúpula y le pidieron un gesto para desactivar la rebelión y deshacer la expulsión del grupo de Patricia de las Heras y Gabriel Le Senne.

La portavoz del grupo crítico de Vox, Idoia Ribas, abrió la puerta a dejar sin efecto la expulsión y volver a la situación previa a la crisis, pero pidió que para eso se mueva también la dirección nacional de Vox. «Eso dependerá del posicionamiento de los órganos de nuestro partido», dijo la portavoz cuando se le preguntó por la posibilidad de anular las expulsiones.

«Nosotros tenemos la mano tendida para llegar a un acuerdo», insistió. Afirmó que espera llegar a un acuerdo con la dirección «por el bien de todos» y de los ciudadanos «que se merecen seguir contando con la estabilidad que este grupo ya ha demostrado que va a dar a Govern». También insistió en que nunca tuvieron la intención de abandonar Vox.

La tregua

El tono de la diputada fue mucho más conciliador que el de días anteriores y confirmó que las dos partes han sellado una tregua mientras negocian una solución a la grave crisis interna del partido. Los críticos de Vox no detallan por ahora cuáles son sus exigencias para llegar a un acuerdo, pero precisan que no hay líneas rojas. «En cuanto tengamos algo concreto podremos comunicarlo», dijo.

Informó de que no han hablado con Santiago Abascal ni con la dirección del partido y preció que la oferta de mano tendida la han hecho al president del Parlament «para que la haga llegar a los órganos pertinentes».

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Buen gesto

Valoró que Le Senne tuviera el gesto de suspender la reforma exprés del reglamento que les habría dejado fuera del grupo parlamentario. «Nosotros no entendíamos muy bien a qué venía este procedimiento de urgencia pactado entre el president del Parlament y el PSOE, que es el partido que está ostentando puestos en la Mesa», dijo

«Nunca hemos tenido intención de abandonar nuestro partido, ni antes ni ahora» y recordó que el expediente de expulsión que pesa sobre ellos se debe a un escrito de Gabriel Le Senne y Patricia de las Heras.

El president del Parlament, Gabriel Le Senne, también se expresó en un tono conciliador. «Hay que esperar; queremos transmitir esa tranquilidad y calmar un poco el asunto», dijo. Aseguró que había decidido desconvocar las reuniones que debían abrir la puerta a una reforma del reglamento exprés porque considerabn que es mejor que esta modificación se tramite del modo ordinario «con tranquilidad».

También restó importancia al hecho de que el sector crítico registrara ayer en el Parlament el acta de la reunión en la que se acordó su expulsión del grupo la de Patricia de las Heras. Afirmó que no tiene «mayor relevancia». «Es un documento jurídico, igual que nosotros ayer también registramos otro». El documento que mencionó Le Senne es el escrito por el que se comunica al Parlament que Vox ha suspendido de militancia a los cinco diputados.

Los dos sectores tienen previsto reanudar las conversaciones para cerrar el acuerdo a partir de la próxima semana, según señalan las fuentes.

El acta de la reunión de Vox habla de «deslealtad» de la presidenta al grupo

El acta de la reunión en la que se expulsó a los dos diputados recoge que primero se cambió el propio reglamento interno de Vox antes de iniciar el encuentro, en el que se recoge expresamente la petición de dimisión a Gabriel Le Senne «por su absoluta incapacidad para romper el cordón sanitario» impuesto por otros grupos y por el desempeño «parcial» de su cargo, su absentismo a las reuniones y la «ocultación de información relevante». De Patricia de las Heras señalan que ha realizado declaraciones contrarias a los acuerdos del grupo, no participa en las reuniones y ha intentado asilar al grupo parlamentario. «Los continuos obstáculos de la señora de las Heras a la actividad del grupo y su deslealtad manifiesta ha sido apreciada por la mayoría de los miembros y así lo ha trasladado el portavoz», señala el acta.