Delgado, en una de sus últimas visitas a la Audiencia, para testificar en el juicio del 'caso Cursach'. | ALEX SEPULVEDA

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El exconseller de Turisme, Carlos Delgado, se sentará en el banquillo de los acusados a partir del 25 de noviembre para el juicio del ‘caso Calanova’. La Audiencia Provincial ha señalado entre esa fecha y el 17 de diciembre de este año las quince sesiones de la vista, en el que el expolítico afronta una petición de un año y nueve meses de cárcel por parte de la Fiscalía. El señalamiento llega casi tres años después de que se dictara auto de apertura de juicio oral por el procedimiento. El retraso que tiene la Audiencia a la hora de señalar macro causas trsa el atasco provocado, entre otros por el ‘caso Cursach’ y sus piezas ha llevado a esta demora en el señalamiento del juicio.

La Fiscalía acusa a Delgado de favorecer a la sociedad Port Olimpic Calanova para que ganara el concurso para la privatización del puerto deportivo porque uno de los socios de la misma era Carlos Gelaber, amigo y actual socio de despacho de abogados de Delgado.

A través de la influencia del conseller, según la acusación, la empresa se hizo con la adjudicación y más tarde, Gelabert y su socio también acusado, Francisco López Hinojosa, consiguieron amplios beneficios al vender su participación en la sociedad. Además de estos tres acusados también se sentarán en el banquillo el exsecretario general de la Consellería, Joaquín Legaza y el empresario Feipe Elvira. Afrontan peticiones de prisión similares a las del exconseller, para quien también se reclama el pago de una multa de 1,1 millones de euros. En la causa también está personada la Comunitat Autónoma como acusación y eleva la petición de prisión hasta los dos años. El exconseller niega cualquier delito y responsabiliza a los investigadores de idear una causa en su contra plagada de irregularidades.