El portavoz y vicepresidente del Govern, Antoni Costa, en una rueda de prensa tras un Consell de Govern. | Redacción Ibiza

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El Govern de la 'popular' Marga Prohens ve bien la subida del 5 % del Salario Mínimo Interprofesional acordada por el Gobierno de Pedro Sánchez con los sindicatos, pero preferiría que estuviera pactado con los empresarios. «Estamos a favor de los incrementos prudentes, pero valoraríamos más positivamente si esto fuera fruto del consenso entre patronales y sindicatos; hay preocupación en el mundo empresarial por esta subida», ha señalado este viernes el portavoz y vicepresidente balear, Antoni Costa.

El también conseller d'Economia, Hisenda i Innovació ha comentado que lo ideal habría sido «no precipitarse» con esta subida, de la que ha reiterado que están a favor. De hecho, los propios sindicatos lo ven igual. La medida ha generado «una gran satisfacción» entre las fuerzas sindicales de Baleares, donde la medida beneficiará a cerca de 30.000 trabajadores, según estimaciones de UGT. Con todo, el secretario general en las Islas de este sindicato, Lorenzo Navarro, ha asegurado que el sabor ha sido agridulce, ya que habrían preferido una subida más modesta a cambio de que hubiera incluido el acuerdo de las patronales. Especialmente por evitar un ambiente enrarecido que dificulte las futuras negociaciones de convenios sectoriales.

«Nos hubiera gustado que la CEOE y Cepyme hubiesen dado su apoyo e incluso habríamos podido llegar a acordar un 4 % de subida», ha dicho el portavoz de UGT. «Da mucha más seguridad un acuerdo tripartito de cara a las negociaciones que tengamos próximamente».

Desde la Federación de la Pequeña y Mediana Empresa de Mallorca (PIMEM), su presidente Jordi Mora, ha señalado que la subida es «asumible a nivel general» por las empresas de Baleares, aunque ha matizado que «es cierto que hay determinados sectores que lo pasarán peor» para ejecutar dicha subida. Concretamente, el sector agrario, para quien las patronales demandaban bonificaciones para poder asumir ese incremento, una petición que, por el momento, no ha sido escuchada.