Un compañero en la mochila: la ‘Guia botànica de la serra de Tramuntana’

Bonet y Vicens explican que «en el año 2000 publicamos La flora de la serra de Tramuntana, un libro que está agotado. Hace un año y medio nos planteamos hacer otra obra en este sentido con la actualización de la información y la incorporación de la fotografía digital. Por tanto, la Guia botànica de la serra de Tramuntana no es una reedición del primer libro con una simple reactualización, sino de una obra completamente nueva».

Los autores señalan que «hemos seleccionado las 160 plantas -de flora vascular- que hemos considerado más representativas de Tramuntana. Existe actualmente una desvinculación general con la botánica y la mayoría de la población conoce poco más que plantas de jardinería. Con este libro proponemos que quien se pasee o haga excursiones por la Serra tenga la oportunidad de conocer una buena parte de las plantas observadas. Al final, se trata de que para valorar algo primero tenemos que conocerlo. Con este libro pretendemos que el lector, en casa o en plena excursión, pueda conocer y apreciar nuestro valioso patrimonio botánico, en concreto el de Tramuntana. La divulgación es una herramienta de primer orden para la conservación. Y el formato del libro es ideal para meterlo en la mochila y que sea un compañero de excursión».

Evidentemente, la elaboración de la guía ha obligado a un intenso trabajo de campo que a veces es complicado por lo abrupto de la orografía de Tramuntana. Bonet y Vicens añaden que «hemos contado con el asesoramiento científico de Josep Antoni Rosselló, de la Universitat de València, y Maurici Mus, de la Universitat de les Illes Balears, que a su vez los autores del prólogo».

El libro presenta además con unas aportaciones que pueden resultar de mucha utilidad para el lector: itinerarios botánicos con las plantas más significativas que se pueden observar en la ruta propuesta, con mapas incluidos, y un glosario de términos botánicos, que contribuyen a una mejor comprensión de las descripciones de las especies. Asimismo, se ha revisado y cuidado especialmente la toponimia tradicional. Siempre se proponen rutas por zonas no restringidas y, por supuesto, hay que respetar al máximo las plantas y no arrancarlas ni alterarlas en su ubicación natural.

Para los autores, «estamos convencidos de que para conocer las plantas no hace falta ser un experto. El conocimiento que transmitimos con el libro es un aliciente más y contribuye a un mayor disfrute en las excursiones por la Serra. Somos conscientes de que muchos turistas recorren también los caminos de Tramuntana y por ello no descartamos futuras traducciones a otros idiomas».

Las fichas que aparecen en el libro se muestran con una fotografía de calidad de la especie, su nombre científico, su nombre común (no todas lo tienen), una descripción e información sobre su hábitat, su época de floración, el color de la flor e incluso los usos, si los tienen. Bonet y Vicens indican que «sin descuidar la terminología botánica correcta, intentamos que los textos sean comprensibles para el lector».

Lamentablemente, el trabajo de los autores constata que «las plantas de la Serra no se están recuperando y su biodiversidad se está reduciendo. La acción de las cabras es un primer factor inmediato, pero el cambio climático y la fragmentación de los ecosistemas contribuyen a esa pérdida. Si a ello añadimos unas precipitaciones cada vez más irregulares y las alteraciones de los ciclos biológicos de las plantas, se nos presenta un futuro preocupante para la flora de Tramuntana y para la del resto de las Islas».