Un técnico del Ibanat revisa un área de pinar incendiada. | Alejandro Sepúlveda

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Mientras grandes incendios están asolando varios países mediterráneos, con decenas de víctimas mortales y miles de evacuados, el fuego en Baleares, de momento, no está creando graves problemas (18,57 hectáreas afectadas hasta el 15 de julio) y, al igual que el año pasado, la mayoría de avisos se refieren a conatos, es decir, no superan una hectárea. No obstante, toda precaución es poca y en cualquier momento puede originarse un gran incendio. Este verano en Mallorca está marcado por las altas temperaturas y, por un factor que no estuvo presente el año pasado: la gran cantidad de biomasa acumulada en los bosques de la Isla, especialmente en la Serra de Tramuntana, como consecuencia del paso del temporal Juliette, a finales del pasado febrero.

Juliette sólo pudo hacer una aportación positiva: proporcionar mayor humedad al suelo, pero, aun así, no es suficiente para paliar el alto riesgo de incendios. Técnicos forestales siempre han apuntado que un escenario de falta de lluvias hace que la vegetación esté más seca y, por tanto, sea más propensa a la combustión. Sin embargo, un escenario de lluvias recientes lleva a una mayor proliferación de la vegetación y, por tanto, a la presencia de mayor combustible potencial para el fuego.

Coincidiendo con el décimo aniversario del gran incendio de Andratx, Estellencs y Calvià, el mayor de la historia registrada en las Islas con casi 2.500 hectáreas afectadas, desde la Conselleria d’Agricultura, Pesca i Medi Natural se ha lanzado el mensaje de que la mejor estrategia contra el fuego forestal es la prevención y que, con el actual escenario de cambio climático, con veranos de sequía extrema y oleadas de calor recurrentes. se prevén incendios más extensos, más intensos y más peligrosos.

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La campaña oficial de alto riesgo por incendios en Baleares, que abarca desde el 1 de mayo hasta el 15 de octubre, prohíbe hacer fuego en terreno forestal y a menos de 50 metros de éste. En la franja que va desde los 50 a los 500 metros de distancia de un terreno forestal, para hacer fuego es necesaria una autorización administrativa. Desde la Administración autonómica se pide a la ciudadanía que se extreme la precaución y evitar imprudencias.

En caso de episodios meteorológicos extremos, y tal como ya ha ocurrido este verano, la Conselleria puede suspender las quemas ya autorizadas por fuerte viento o temperaturas extremas. El operativo de extinción en la temporada de alto riesgo en Baleares integra un total de 350 personas entre las brigadas, ingenieros técnicos y forestales, Agents de Medi Ambient, personal de la Central de Comunicacions d’Incendis Forestals y tripulaciones de los medios aéreos. Aunque los medios humanos y materiales se distribuyen por islas, el operativo está diseñado y cuenta con protocolos para que sea un dispositivo interinsular con capacidad de movilización allí donde sea necesario.

En cuanto a los medios aéreos, están operativos 3 helicópteros en Mallorca (2 en Son Bonet y 1 en la base de Petra); 1 helicóptero en Menorca (s’Arangí); y 1 en Eivissa (en la base operativa de sa Coma). Los medios aéreos estatales de refuerzo (1 avión anfibio Canadair ubicado en el Port de Pollença y 1 avión de carga en tierra con base en Son Bonet) se incorporaron al operativo el pasado 1 de julio.

No hay que olvidar que tan o más importante que el servicio de extinción es la labor de prevención que se realiza durante el invierno, especialmente la limpieza de vegetación (especialmente intensa tras el paso de Juliette), la creación y mantenimiento de cortafuegos y dejar los caminos forestales en condiciones para la adecuada circulación de los vehículos de extinción. También se recuerda que los propietarios de infraestructuras o viviendas en terreno forestal están obligados a crear franjas de autoprotección, teniendo despejados de vegetación los alrededores del inmueble y cada uno de los lados de los caminos de acceso para una mayor seguridad en caso de incendio.

El apunte

No arrojar cigarrillos, basuras y botellas de vidrio

Además de atender las normas sobre prohibición y autorización de quemas, es recomendable, para prevenir incendios forestales, no arrojar cigarrillos, basuras y especialmente botellas de vidrio. Estras últimas hacen un efecto lupa con el sol. Si se descubre un fuego en su inicio, hay que avisar al 112 inmediatamente. En caso de verse sorprendido por un incendio, hay que procurar ir por las zonas de mayor visibilidad y más despejadas de combustible vegetal.